El mago Rahm borda la función en Madrid
El ‘León de Barrika’ da una exhibición en el recorrido final del Acciona Open de España, bate el récord del campo e iguala los tres triunfos en el torneo de Seve.
Foco unidireccional dirigido exclusivamente a Jon Rahm. En el día de mayor afluencia al Acciona Open de España, que como dato oficial sitúa en 33.000 personas la asistencia al torneo, el ‘León de Barrika’ salía como líder en el último partido del torneo. Fotos, gritos, vítores, ánimos... de un séquito de de cientos de personas que siguen casi religiosamente cada uno de los golpes del jugador vasco de 27 años. La ‘Rahnmania’ es fiel y más aún si las manos mágicas del español ofrecen un gran espectáculo como el de esta semana en el madrileño campo del Club de Campo.
“Avanzar hacia el green del 18 cuando sabes que vas a ganar es el paseo más bonito que puede haber en golf y ojalá poder repetirlo en la jornada final”, explicaba en la previa el español que venía al torneo del DP World Tour con el firme propósito de igualar los tres éxitos en el abierto nacional de otro genio, el de Pedreña, Seve Ballesteros. Un espejo en el que Jon siempre busca verse reflejado, tanto por lo que hace dentro del tapiz verde como en esa responsabilidad de seguir su legado y hacer que el golf siga creciendo en nuestro país.
Rahm sabía que la mejor manera de presionar al puñado de jugadores que podía evitar que levantara la copa que ya ganó en 2018 y 2019 era seguir acumulando números en rojo en su tarjeta. Y empezó cumpliendo a rajatabla el cometido. Birdies en el 2, 6 y 7. El resto, pares. Trabajo perfecto del vizcaíno... pero su acompañante habitual, el australiano Min Woo Lee, que ha estado en su partido los cuatro días le calcaba los números. Además, el francés Pavon, el sudafricano Lombard y el italiano Molinari también iban en -3 en la mitad del recorrido.
Tocaba apretar más las tuercas. Salida de prestidigitador en el par 3 del 9 en un bola que estuvo muy cerca de embocar directamente en el hoyo, como si fuera un triple de Stephen Curry. El bote alejó más de lo que merecía esa salida del tee, pero Rahm demostró que su idilio con el putt va por buen camino y sumó otro birdie más, el cuarto en nueve hoyos para coger dos impactos de ventaja frente a Lee. Nuevo rojo en el 11 que le hacía abrir más hueco aunque una mala salida en el 12 le hizo pintar el primer y único verde del día, y desde el viernes.
El 13 era un nuevo punto de inflexión. Quizá el definitivo. Consistente birdie de Rahm mientras Lee sólo podía firmar el par. Tres de ventaja con cinco hoyos por jugar. Mirada de aceptación del australiano de 24 años, un fabuloso golfista especialmente en el juego corto que no pudo mantener la velocidad de crucero del español. Y más después del último truco del mago de Barrika. Segundo golpe en el par 5 del 14... y la bola tocó la bandera. El albatros sobrevoló el Acciona Open de España ante los boquiabiertos espectadores que se rompieron las manos aplaudiendo. Igual que cuando embocó el putt de eagle. -23, seis de ventaja. Game over.
El único objetivo que le quedaba a Rahm era batir el récord del campo que él mismo tenía desde 2019 con -22. En el 15 la bola se quedó asomada al hoyo para un nuevo birdie en el 17. Fin de fiesta regalando el último en el 18 tras recibir una estruendosa ovación en su camino hacia el abarrotado green. Imparable y espectacular. Ronda final impresionante de 62 golpes, -9 (ocho birdies, un eagle y un bogey), para un total en el torneo de -25. Brazos en alto, récord y Madrid rendida a sus pies. Rahm ya es como Ballesteros en el Open de España.