Zamorano, Nico García y Lozano, sin mínimas en sus pruebas

No fue la mejor jornada para la natación española en el Open de Primavera que se disputa desde el sábado en Torremolinos. La única mínima mundialista la protagonizó Ángela Martínez en el 1.500 libre, aunque la joven de 18 años ya estaba clasificada para el Mundial de Budapest en el 800. Pero sus 16.20.66 es un buen punto de partida para la nadadora del KZM Swimming Team. Le siguieron en el podio la china Kristel Kobrich, de 37 años (16.27.36) y Paula Otero, también ya con el billete para el Mundial en el 800, que se conformó con la tercera plaza (16:31.86).

También lució, ya clasificado anteriormente, el del CN Churriana Carlos Garbach, que registró la cuarta mejor marca de la historia española en el 800, con 7:56.95. La medalla se la entregó el récordman español Marco Rivera. Buen guiño. Le cede el testigo en una disciplina que en los últimos años estaba prácticamente estéril a nivel mundial. Carlos Quijada y Albert Escrits, con un registro de 8:03.34 y 8:05.78, le siguieron.

Acabado el fondo, se dio paso a las pruebas medias donde Nico García, África Zamorano y Alberto Arévalo buscaban agrandar la lista de cinco nadadores clasificados ya para Budapest. Pero ninguno de ellos consiguió el propósito. África Zamorano (2:11.43), en los 200 espalda, se quedó a cuatro décimas; Nico García, en la misma prueba (2:01.36) y sorprendido por Diego Mira (2:00.45), acabó tercero de la final, a tres segundos de la marca, mucho peor que en las eliminatorias; y Alberto Lozano (52.62), también peor que por la mañana.

En los 100 mariposa, con Mireia Belmonte fuera de las finales por la mañana al quedar la número 44 con 1:05.48, la victoria fue para la portuguesa Mariana Cunha, con 1:00.39, mientras que le siguió Carla Hurtado con 1:00.69 y Catalina Corró con 1:00.82.