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BALONMANO

Serdio se apunta al casting de pivotes en los Hispanos

"En los últimos años estaba en las listas de la Selección, pero al final no estraba en el grupo. A ver si aprovecho la oportunidad", comenta el asturiano

Serdio se apunta al casting de pivotes en los Hispanos

Debutó en la Selección en 2018 de la mano de Jordi Ribera, cuando este asturiano de Avilés militaba en el Atlético fde Valladolid. Luego Abel Sardió saltó al Barça, estuvo un año en su plantilla, y acabó cedido en el Wroclak Plock polaco, donde este pivote de 1,96 metros y 27 años cumple su segunda temporada y le queda "un año y medio más de contrato".

En total suma 16 partidos con los Hispanos, con 31 goles. Si en la primera década el piovote español fue Rolando Urios, y la segunda lo fue Julen Aginagalde, ahora se pensaba que Serdio podría ser el sucesor, pero... "Entraba en las últimas listas de los Hispanos, pero al final ni iba a los campeonatos ni a las convocatorias. He seguido trabajando en mi club, en Polonia, y siempre esperas que te puede llamar el seleccionador, pero la verdad es que que ha sido una sorpresa agradable verme para disputar la Golden League este fin de semana", señala Serdio.

-¿El puesto de relevo de Aginagalde está abierto?

- Creo que Jordi Ribera está probando jugadores, como a Rubén Marchán en el Mundial, a Pecina en el Europeo, ahora yo. Va haciendo combinaciones. Yo quiero aprovechar la ocasión y que no se pierda esta oportunidad en un grupo con tan buen ambiente, porque cuando eres rival de club son luchas muy duras, pero llegar a la Seleccion y esto es una familia.

´-El seleccionador apuesta por un pivote que ataque y defienda, para hacer un cambio menos durante en juego.

-Mi rol en el club es más ofensivo porque Sabaté quiere que esté descansado para jugar en ataque, pero siempre he actuado en defensa también, y no me ha olvidado. Si me ponen en esa labor también puedo rendir.

-En Polonia manda el Kielce, y el Plock lleva años intentando cambiar la hegemonia.

-Esta temporada parece que lo tenemos más cerca que nunca. En la ida perdimos por un gol en su pista, por lo que si mantenemos la marcha nos jugaríamos la Liga en el último partido, con el Kielce, pero en nuestra casa. Es el año que más cerca lo tenemos.

-¿Qué tal va con el polaco?

-Eso lo llevo mal. Es un idioma muy complicado. En mi equipo somos cuatro españoles, y el año anterior también estaban otros dos, contando a Dutra, brasileño, y a mi eso me viene mejor por la comunicación, claro.