BALONMANO | CAMPEONATO DE EUROPA
Casado se doctora al mando de España ante Alemania
Exhibición de los Hispanos, líderes invictos, que se acercan a las semifinales pese a las dudas por los positivos de Cañellas y Tarrafeta.
Con los positivos de Tarrafeta y Cañellas por la mañana, estábamos un poco timoratos ante las opciones de España frente a una Alemania con casos hasta en el vestuario y pocos jugadores para completar una selección. La impresión errónea era que los Hispanos salían en desequilibrio por falta de diestros suficientes en la primera línea. Pues no, nada de eso: el debutante Agustín Casado, único central durante la hora de partido, lideró al grupo para conseguir un triunfo muy importante para estar en las semifinales porque Alemania estaba con dos puntos: 29-23 (14-12). La Selección es la única invicta del grupo tras dos jornadas (esta, y la que se arrastra),
Casado, que aún milita en el Logroño, se ha especializado en golpear a los equipos alemanes: le marcó 16 tantos al Magdeburg, y esta vez cinco. Hubiese metido más si hubiesen sido necesarios, pero como central tiene la obligación moral de repartir juego, y en este choque se doctoró con España. Jugó de sobresaliente. Y fue un factor desequilibrante.
La defensa fue otra de las causas que decantó el partido, porque España dejó a Alemania quince minutos a cero. Esa desventaja de un cuarto de partido no se arregla con facilidad a este nivel. Hubo un momento que siempre aparecían dos camisetas rojas alrededor del alemán al que le llegaba la bola. Y además quedaba la otra parte de la muralla, Gonzalo Pérez de Vargas, con muchos doctorados a cuestas, y este otro más.
No se podía esperar que España se gustase tanto en ataque, ¡tanto frente a tipos duros de verdad, no de postureo! El gol del 18-12, por la velocidad de las continuaciones del juego español soltando el balón para esquivar la falta, es digno de repasar para quien pueda. Y se verá a los fornidos alemanes persiguiendo sombras sin saber donde está el cuero como si los españoles fueran magos de circo.
Antonio García se llevó el premio al mejor jugador del partido por todo los que aportó, como todos los mencionados, o como Maqueda, o Gurbindo, o Figueras, o un excelso Solé. Es decir, la coral española cantó como debía para conseguir un triunfo inapelable.