El Rey: "Vuestros sueños son nuestros sueños"
Felipe VI presidió la Gala del Comité Olímpico Español en la que se recordaron las 17 medallas en los recientes Juegos de Tokio.
El año olímpico, que tuvo lugar un año después de lo previsto en Tokio, se cerró hoy con la Gala del Comité Olímpico Español. Un momento para recordar las 17 medallas conquistadas (tres oros, ocho platas y seis bronces) y los 42 diplomas. Una tarde para revivir las dos semanas en las que el deporte aportó luz en mitad de la pandemia. Un acto al que asistió el rey Felipe VI y la reina doña Letizia acompañados por el ministro de Cultura y Deporte Miquel Iceta.
"Campeones noveles como Alberto Ginés o Adriana Cerezo toman el testigo de auténticos referentes de nuestro deporte en diferentes disciplinas como Chuso García Bragado, Carla Suárez, Raúl Entrerríos, Laia Palau o Pau Gasol, quienes han logrado construir una trayectoria ejemplar y un legado repleto de éxitos", recordó el Rey ante muchos de los medallistas que hicieron frente a un ciclo "desafiante y por momentos inciertos".
"En menos de tres años, esperamos estar disfrutando de la cita olímpica de París. Y no podemos sino imaginar que, en 2024, España seguirá mostrándose al mundo como un referente también en el deporte, como un país comprometido con sus deportistas y con el olimpismo", animó don Felipe.
"Seguid cumpliendo vuestras metas y objetivos, porque vuestros sueños son los sueños de todos los españoles. Y esa es una gran responsabilidad", les dijo el monarca.
Unos ya cumplieron casi todos, como Chuso García Bragado, el marchador de acero que se despidió con 51 años y tras ocho Juegos. "Espero poder devolver todo lo que me ha dado el deporte y estimular a muchos chavales jóvenes", advirtió el madrileño. Jóvenes osados como Adriana Cerezo, plata en taekwondo con 17 años: "Voy a por el oro a París, Los Ángeles y lo que venga por delante". Una cita, la de 2024, con la que se atreverá Teresa Portela, que tras su récord de seis presencias (la española con más) cambiará el K1 por el K4 500. Con lágrimas en los ojos, expresó su felicidad: "Me he visto reflejada en cada vídeo de cada compañero. Este año era especial porque eran los sextos Juegos quería disfrutarlos y ganar esa medalla después de la llorera de Londres (fue cuarta). Es la recompensa, y después de ser madre". Naira, su hija, pudo aplaudir a mamá desde el auditorio.
Alejandro Blanco, emocionado, comparó a los deportistas con los héroes de la Antigua Grecia. Pero miró hacia adelante: "Tenemos asegurado un espectacular futuro para las próximas décadas". Y les instó a "luchar por una España sin complejos, integradora, igualitaria, la que los deportistas representan". Blanco destacó también que el 56% de los 328 deportistas clasificados terminaron entre los ocho primeros, "y eso es lo más importante".
Una noche para recordar. Una noche para disfrutar. Una noche que dejó ganas de más. Dentro de tres años, París espera.