La odisea de Mateo para boxear en Francia: 31 horas de viaje tras un accidente de tráfico
El púgil boliviano, residente en Logroño, no quiso dejar tirado al promotor francés pese a los problemas. Le prometieron compensar los gastos extra, pero no han cumplido.
Lejos de los focos de los grandes combates, todavía existen historias en el boxeo que son difíciles de creer. Una de ellas le pasó al boliviano, residente en Logroño, Ricardo Fernández 'Mateo'. El púgil de Euskobox tenía una pelea el pasado sábado en Carcasona (Francia) ante el campeón galo del ligero Jaouad Belmehdi. El viernes, él su equipo (José Ignacio Barruetabeña y Félix García) se dirigían hacia el pesaje cuando comenzó su odisea. Desde Logroño hasta el lugar del combate hay 591 kilómetros. Es habitual que púgiles españoles y franceses elijan el coche porque pese a las distancias sea un viaje más cómodo que el avión debido a las conexiones. Ese desplazamiento, obviamente, está cubierto en cuanto a gasto por el promotor local.
Todo se torció al pasar la frontera en Biarritz. Mateo y su equipo sufrieron un accidente. Por suerte, los tres integrantes del vehículo salieron ilesos, pero el coche quedó inservible para continuar la marcha. Lo fácil hubiese sido buscar un método de trasporte hasta Logroño y rechazar la pelea, pero el boxeador y sus entrenadores no quisieron dejar tirado al promotor francés, ya que el suyo era el combate de fondo de la velada que organizaba. Por ello, hablaron con su promotora y con la del rival para buscar una solución. Se las ingeniaron tomando taxis, trenes y pernoctando ese viernes fuera de Carcasona para poder llegar a la ciudad gala el sábado tras 31 horas de viaje. Los visitantes adelantaron todo el dinero, y el promotor francés prometió asumir los costes de todo.
Mateo llegó a Carcasona, se pesó y peleó. Cayó a los puntos en ocho asaltos (80-72, 80-72 y 79-73), pero dejó una buena sensación, más tras todo lo pasado. "Es increíble cómo ha respondido 'Mateo' frente a un verdadero prospecto. Ha ido de menos a más, incrementando el ritmo y trabajando lo preparado. Belmehdi es muy peligroso y ha ganado el combate, pero no lo ha tenido fácil. El despliegue físico y de concentración de 'Mateo' después de esta odisea y con las dificultades a las que hemos hecho frente son para quitarse el sombrero. Este chico es admirable", explicaba el preparador riojano José Ignacio Barruetabeña tras el pleito.
La ingrata sorpresa llegó ahí. Al percibir la bolsa, el promotor francés no pagó nada de los sobrecostes que prometió compensar. Hasta el momento sigue sin hacerlo y la promotora del boliviano está molesta, con razón. "Vamos a ver cómo responden a lo largo de la semana. Si no cumplen, recurriremos a las medidas legales que consideremos precisas para defender los intereses del boxeador y sus entrenadores. Esto es inadmisible y muy malo para el boxeo", asegura un José Luis Celaya, su manager, quien ya ha presentado una queja formal a la Federación Francesa a través de la Española.