Semedo enciende la luz de la esperanza en el Ademar León
En plena crisis de juego, con tres derrotas consecutivas, el equipo de Manolo Cadenas toma aire ante un Bidasoa perdido.
En plena crisis de juego, con lesionados, sin la plantilla completa, con dudas en todos los niveles del club, el Ademar salió del apuro ante un Bidasoa que no fue el equipo que se esperaba. En la locura de un juego heterodoxo que planteó el Ademar, no se manejó bien el cuadro de Irún, desquiciado en todas las posiciones: 34-25 (18-13).
Nombres propios, el de Semendo (autor de 11 goles desde la primera línea) y el del portero Bosmastar. Lo dos le dieron aire al equipò leonés, que con los tantos del caboverdiano encuentran un poco de luz a su inestabilidad inicial.
En realidad algo debió pasar en el Ademar estos días porque sus jugadores estuvieron desatados durante la hora del partido, con más pasión que cabeza, porque no se entiende que los extremos Pérez Arce y Jaime Fernández sumen exclusiones casi al alimón en la recta final del encuentro: 26-22. Y sin embargo, en 6 contra 4 el Bidasoa no restó ni un tanto: 30-23, y eso que atacó al final con siete, sistema que aún debe estar con alfileres en el cuadro de Jacobo Cuétara porque le sirvió de bien poco.