Santos se impuso a Walker en un combate sin "fuegos artificiales"
Thiago Santos derrotó por decisión unánime a Johnny Walker en el combate estelar del UFC Las Vegas 38. Ninguno quiso arriesgar en una pelea táctica.
Dos artistas del KO se enfrentaban en el combate estelar del UFC Las Vegas 38. Thiago Santos y Johnny Walker tienen la capacidad de cambiar el devenir de un pleito con una mano. El primero había prometido "fuegos artificiales", pero en el momento de la verdad la pólvora de ambos estaba mojada. Se esperaba un combate vibrante y disfrutamos de una pelea táctica en la que el respeto excesivo de ambos dejó un espectáculo pobre. Marreta se llevó el triunfo por decisión unánime (triple 48-47) en un combate cerrado por falta de actividad.
El guión del pleito se vio en el primer round. Walker tomó el centro del octágono y Santos prefirió el exterior. Ninguno quiso pararse por el peligro evidente, por lo que nunca hubo intercambios. Walker fintó mucho, pero nunca estuvo cómodo en distancia y eso no le permitió conectar. Lo cierto es que ninguno fue capaz de llegar a su rival, tampoco intentaron encerrar al otro contra la reja para cortar espacios... De hecho, la única mano clara fue en el último asalto. Marreta cazó a Walker, quien pudo resistir en pie. Fuera de eso, ninguno fue efectivo y mucho menos letal. Santos intentó el derribo en el segundo round, pero su compatriota se defendió bien. El mayor pateo del veterano, que tuvo más actividad en la parte final del pleito (fue de menos a más), y esa mano le acabaron dando el duelo. Santos gana, pero no hizo lo suficiente para subir en el ranking. Eso sí, el triunfo es importantísimo para él: corta una racha de tres derrotas consecutivas.