Ale Galán y Juan Lebrón marcan las diferencia como pareja
En Marbella logran su tercer triunfo de la temporada ante Lima y Tapia, que en segundo set se encontraron sin respuestas.
El año pasado fue la pareja a batir, la que rompió las duplas del Circuito buscando contrarrestar a Juan Lebrón y Alejandro Galán. Este año parecía que era posible rebajar su dominio, pero acaban de ganar el primer Master del año, su tercera prueba de las cinco disputadas, y marcan las diferencias en el ranking con Sanyo y Belasteguín, que no han jugado por la lesión de este, la segunda. En la final de Marbella, 7-6 y 6-2 ante Lima y Tapia, que debutaban por un título.
Que Lebrón y Tapia tienen unas pegadas colosales está fuera de duda, pero no es sólo eso: dominan todos los registros, y si se suma la inspiración de Galán para defender lo imposible (otros días es Lebrón) la tarea no de ganarles sino de mantenerles el pulso, en una quimera.
Es una pareja que obliga a más de lo que se puede, que intimida, que llega a todo. Por eso el enorme partido de Lima y Tapia no tuvo premio en el primet set, y con 7-6 tras un esfuerzo inmenso, dio la impresión que se vinieron un poco a bajo, y encajaron un 6-2 que no explica la calidad de los puntos que jugaron y que hubiesen sido ganadores contra otros rivales que no fuesen estos dos jugadores españoles, que con calor son aún más letales.