La tragedia continúa en el K2
La cima del Himalaya en la que murió Sergi Mingote nos deja la muerte del búlgaro Atanas Skatov y a otros tres montañeros desaparecidos desde el viernes.
En este comienzo de 2021 el K2 ha vuelto a dejar patente por qué es una de las montañas más peligrosas del mundo. Tras la muerte de Sergi Mingote el pasado 16 de enero durante la expedición que, encabezada por Nirmal Purja, logró alcanzar la cima por primera vez en invierno, este viernes hemos conocido otro fatal suceso en esta montaña.
El viernes el montañero búlgaro Atanas Skatov perdía la vida tras sufrir un accidente durante la ascensión a unos 7.300 metros de altitud. Ese mismo día otros tres montañeros desaparecieron en el K2 en una zona próxima a los 8.200 metros de altitud. Se trata del pakistaní Ali Sapdara, el islandés John Snorri y el chileno Juan Pablo Mohr, amigo de Sergi Mingote y que acompañaba al español en la expedición en la que perdió la vida.
Desde entonces las fuerzas aéreas de Pakistán buscan si hay rastro de los desaparecidos pese al clima hostil que hay en la cima con fuertes vientos. El ejército de Pakistán ha reconocido la montaña hasta los 7.800 metros de altitud sin de momento hallar rastro de unos montañeros que intentaban cumplir su sueño de alcanzar la cima del K2 en invierno para emular la hazaña de los diez nepalíes y, en el caso de Mohr, también rendir homenaje a Sergi Mingote.
Se suspende la búsqueda este lunes por el mal tiempo
Las autoridades paquistaníes suspendieron este lunes por mal tiempo la búsqueda en helicóptero de tres montañeros que perdieron contacto con sus equipos el viernes cuando trataban de escalar el K2, una expedición que ya se ha cobrado la vida de dos escaladores esta temporada.
La operación de búsqueda del chileno Juan Pablo Mohr, el islandés John Snorri, y el paquistaní Ali Sadpara, desplegada por el Ejército de Pakistán, "se ha cancelado por ahora. Las autoridades decidirán si reanudarlo mañana o no", dijo a Efe el presidente del Club Alpino de Pakistán, Abu Zafar.
Los escaladores habían dejado el campamento la madrugada del viernes para aprovechar una ventana de buen tiempo para tratar de hacer cumbre en el K2 (8.611 metros).
Sin embargo, horas después los equipos de Mohr, Snorri, y Sadpara fueran incapaces de contactar con ellos y sus localizadores GPS dejaron de dar señales, por lo que el sábado se dio inicio a la búsqueda en helicóptero de los montañeros.
Este lunes dos helicópteros sobrevolaron, por tercer día consecutivo, unos 7.000 metros y recorrieron las pistas de la ruta de los escaladores desaparecidos, informó en Facebook el líder de la expedición, el nepalí Chhang Dawa Sherpa, que participa en el rescate.
Hoy "teníamos menos visibilidad y la parte superior de la montaña está cubierta por nubes. Durante los últimos tres días, los pilotos hicieron un gran trabajo, más allá de sus límites, pero no podemos encontrar ninguna pista allí", explicó Sherpa.
"El equipo está esperando por una meteorología favorable que permita la búsqueda", añadió.
Pocas esperanzas
A los tres escaladores también les acompañaba Sajid, hijo de Ali Sadpara, que se encontraba con ellos en el conocido como "cuello de botella", a 8.200 metros, pero tuvo que abandonar y regresar al campamento III debido a un problema con su regulador de oxígeno.
Sajid les esperó durante horas en el campamento III para asistirlos durante su regreso, pero finalmente, exhausto, regresó al campamento base.
"Estoy seguro de que llegaron a la cima y, a su regreso, es posible que se hayan encontrado con algún problema o accidente", dijo Sajid en una declaración en vídeo publicada ayer.
Las condiciones y las bajas temperaturas del pico ponen a contra reloj las operaciones de búsqueda, ya que "después de tres días en invierno, sus posibilidades de estar con vida son casi nulas", dijo Sajid.
La desaparición de los tres escaladores llega después del éxito alcanzado el pasado 16 de enero, cuando 10 nepalíes, nueve de ellos de la etnia sherpa más conocidos por sus habilidades como porteadores, lograron el primer ascenso invernal al K2.
El K2 era el único de los 14 ochomiles que no había sido coronado en invierno y estaba considerado el último gran desafío de la disciplina.
Esta expedición, que comenzó a finales de diciembre, se cobró en enero la vida del montañero español Sergi Mingote, tras una caída, y del escalador búlgaro Atanas Georgiev Skatov por una rotura de la cuerda de seguridad.