Altuna se toma la revancha ante Jaka en el Cuatro y Medio

Altuna estaba hundido hace apenas un mes. El 29 de noviembre le barrió Jaka contra pronóstico en el Manomanista y se planteaba hasta renunciar al Cuatro y Medio, uno de sus torneos predilectos,. Era una rabieta porque un ganador como él solo se olvida de una amargura así con muchos partidos seguidos, con victorias. Y la que consiguió esta vez le ha demostrado que sigue siendo un campeón. El deporte suele dar segundas oportunidades y en el Cuatro y Medio, en el mismo escenario (Miribilla), y ante Jaka, idéntico rival, se dio el gustazo de la revancha. Tras un 3-0 inicial a favor del de Lizartza, de colorado y autor del primer saque del partido, el dominio del de Amezketa fue total hasta el 9-22 final. Esta es la tercera gran txapela lograda por Altuna, campeón de este mismo torneo de la 'jaula' en 2017 y del Manomanista en 2018.

Altuna dominó todas las facetas del juego. Estuvo sólido en el peloteo y letal en el remate. Además, se mostró ágil en la defensa, y tuvo el brillo de taponar las esperanzas de su oponente cuando este trataba de encadenar alguna tacada. Este estuvo lejos del nivel del Manomanista, sin la chispa de hace un mes y demasiado conservador en ocasiones. El amezketarra supo controlar el juego y envió a las piernas de Erik. Fue creciendo, ambicionando la venganza del mano a mano y la jaula aprisionó al colorado.

Altuna ya sabe la fórmula para coger la txapela del acotado: ritmo, vértigo y muchas piernas. Tras un inicio furioso de Jaka, queriedo hundir a Jokin para que su cabeza se pusiera a pensar, comenzó el monólogo. El colorado no fue capaz de asentarse en la cancha y el azul no perdonó. Del 5-5 se fue hasta el 5-8 y en el tramo final, pese a que Jaka arriesgó más y trató de dar una sensación de que estaba en partido, era tarde para la remontada y solo maquilló un poco lo que era una paliza: 9-22. Marcador: 3-0, 3-5, 5-5, 5-18, 7-18, 7-19, 9-19 y 9-22.