"Al fútbol sala se le está menospreciando"
Boyis y Martel, nuevos fichajes del Movistar, valoran la situación de su deporte, sin fecha de inicio por la falta de protocolo en una temporada ilusionante para ellos.
El fútbol sala vive en una enorme incertidumbre después de que se anulase la fecha de inicio de la temporada (5 de septiembre) y se encuentre el inicio de campaña en el aire por la falta de protocolos. Una situación que tiene a los clubes en vilo... y a los jugadores atónitos, como dejaron claro Boyis y Erik Martel, dos fichajes claves del Movistar, campeón de Liga en la burbuja de Málaga. Ambos no quisieron señalar a RFEF, LNFS y CSD, pero la decepción es notable. "Yo no voy a señalar a nadie, sólo pido que se sienten, se pongan de acuerdo y se dejen de tonterías. Si hay otros deportes que tienen protocolo y el nuestro es por falta de acuerdo, la culpa es de todos", afirmó Boyis. "Estoy de acuerdo, deberían mirar todos por el bien de este deporte tan bonito", apuntó Martel.
Los jugadores ejemplificaron por qué piensan que se está "menospreciando al fútbol sala". "Es raro que en un deporte como el balonmano, que se juega con la mano y hay más contacto tengan un plan y el fútbol sala no", reflexionaron. Y aunque reconocieron que jugar sin público no es lo mismo y esperan que los aficionados vuelvan cuanto antes, firmarían "empezar ya" a puerta cerrada. "Llegamos el 3 de agosto con la idea de jugar el 5 de septiembre, pero no es que hayan retrasado, es que han suspendido y no dicen nada. Es frustrante".
Todo en una temporada clave para ellos. Boyis llega procedente del Barça, y asegura que su fichaje por el Movistar no es un paso atrás: "Lo tuve claro desde el principio. Desde pequeño se sueña con vestir esta camiseta". Martel, exOsasuna, tiene claro que la "exigencia en este club es máxima": "Lo que hay que tener claro es que no venimos a sustituir a nadie, sino a dar lo máximo por esta camiseta y a aprender cada día de este club".
Encantados con el recibimiento, tanto de Tino Pérez, técnico, como de los dos nuevos capitanes, Pola y Borja, ambos esperan rendir al máximo nivel que han logrado en sus anteriores clubes. Boyis, como un cierre de garantías, que se ve "capacitado para marcar a los mejores pívots", incluido su excompañero Ferrao. Y Martel, como un jugador capaz de adaptarse a cualquier sistema tras demostrar en Navarra su polivalencia. Y ambos, con el Mundial que se retrasó a 2021 en la cabeza: "Si jugar en el Movistar es un sueño, el Mundial es otro por cumplir".