La Copa del Rey de vela se aplaza a 2021
La actual pandemia ha obligado a posponer la 39ª edición de la Copa del Rey MAPFRE por "responsabilidad sanitaria".
Tras 38 años ininterrumpidos de celebración de una de las mayores competiciones de vela del mundo, la edición de 2020, que iba a celebrarse del 1 al 8 de agosto próximos, pasará a la historia por el aplazamiento de la 39ª edición de la Copa del Rey MAPFRE por "responsabilidad sanitaria". Desde que la pandemia de la COVID-19 obligó a tomar fuertes medidas restrictivas sociales y deportivas, la "responsabilidad sanitaria" siempre ha sido el principal punto de mira del Comité Organizador, presidido por Emerico Fuster.
Un evento como la Copa del Rey MAPFRE, que en la pasada edición contó con la presencia de 132 embarcaciones de 11 clases y 26 nacionalidades y que este año iba a tener unas cifras de participación superiores a 2.000 deportistas de más de 30 países y más de 3.000 personas diarias asistiendo a la competición, tanto en el mar como en tierra, tiene que hacer prevalecer la responsabilidad sanitaria por encima de cualquier interés deportivo o social.
Emerico Fuster, presidente del Real Club Náutico de Palma y del Comité Organizador de la Copa del Rey MAPFRE, ha querido matizar que "para nosotros, tanto como club como organización y tras 38 años ininterrumpidos de celebración, ésta ha sido una decisión muy dura de tomar pero en nuestra mente, ante todo, siempre ha estado garantizar la salud de nuestros socios, nuestros empleados, los deportistas y todos los invitados de la Copa del Rey MAPFRE".
La decisión del aplazamiento no fue fácil y se consultó "la opinión de la Casa Real y de todos los sectores involucrados en el desarrollo de la regata. La Casa Real tiene un papel importante y, por supuesto, le consultamos. Nos dijeron que lleva un seguimiento exhaustivo de la pandemia (de la COVID–19) y que no saben lo que puede ocurrir en agosto”, dijo Fuster.
Añadió que también pidió la opinión de la presidenta de la Real Federación Española de Vela Julia Casanueva antes de tomar la decisión definitiva -“el respaldo fue total”, indicó- y de muchas otras personas y organismos relacionados con la regata.
El presidente, ya con la visión puesta en el año que viene, ha remarcado que "el aplazamiento de la 39ª edición a 2021, con las fechas fijadas del 31 de julio al 7 de agosto nos hace pensar ya en el próximo año, para que entre todos podamos celebrar esta edición con más ganas que nunca. Sin duda 2021 será un momento especial que nos hará recordar la responsabilidad como sociedad ante un problema sanitario mundial que entre todos, espero, habremos conseguido superar".
Además del impacto deportivo y social que tiene la Copa del Rey Mapfre, hay que señalar el económico. En el último estudio económico realizado por el departamento de Economía de la Empresa de la Universitat de les Illes Balears (UIB), dicho impacto era de 17.493.356 millones de euros para la economía de Mallorca.
.La Copa del Rey Mapfre es el evento deportivo anual que más riqueza genera en Baleares, se refiere a la contribución de este acontecimiento deportivo a diversas actividades económicas como el transporte marítimo, aéreo e interior, el alojamiento, la oferta complementaria, el ocio, la cultura y los servicios relacionados con la organización y el mantenimiento de las embarcaciones inscritas.
La Copa del Rey Mapfre aporta diariamente 2,2 millones de euros a la economía de su entorno. El mayor impacto lo generan los propietarios de las embarcaciones qie toman parte en la competición, quienes realizaron un gasto de 6, 4 millones de euros. Los casi 2000 regatistas generaron otros 4, 4 de euros y se situaron como el segundo grupo más beneficioso para la economía mallorquina, seguidos de los invitados a la regata (2.9 millones), el propio RCN Palma (1,8 millones), las marcas patrocinadoras (1.4millones), los medios de comunicación (345.158 euros) y los técnicos de la organización (182.399 euros).
La industria hotelera recibió 4,6 millones de euros, mientras que supermercados y otros proveedores de comida, que alcanzaron los 3,3 millones de euros de facturación de clientes directamente relacionados con la regata.
Las compañías aéreas y marítimas sumaron 2.6 millones de euros. Taxis, autobuses y empresas de alquiler de vehículos alcanzaron los 676.435 euros, mientras que los asistentes a la regata, ya sea como participantes, invitados o como periodistas, gastaron 829.689 euros en ocio, 735.920 en equipamiento deportivo y 743.936 en compras y regalos, entre otros.
La investigación realizada por la UIB revela que el gasto medio de los asistentes a la Copa del Rey Mapfre oscila de manera notable dependiendo de si se trata de un armador (2.668 euros), un invitado (408 euros), un regatista (181 euros), un periodista (212 euros) o un técnico (119 euros). En cuatro de los cinco grupos ese desembolso por jornada es superior al del turista convencional que visita Mallorca (144,59 euros).
Por otra parte, un estudio realizado por la auditora privada Mark Com Works, cifraba en 48.7 millones de euros el retorno económico generado por las 1.339 noticias en prensa de papel, 165 cortes de televisión, 6.259 publicaciones online y 180 referencias de radio.