Martín Fiz, de campeón del mundo a repartidor de su tienda
El atleta vitoriano, de 57 años, reconoce que la experiencia y ver “la cara de felicidad y sorpresa” de las personas a las que ha llevado sus pedidos “no tiene precio”.
Decirle a un maratoniano que se quede quieto se antoja prácticamente imposible. Pero si el maratoniano en cuestión es Martín Fiz, casi nada puede llegar a sorprender. ¿O sí? El caso es que la crisis del COVID-19 le ha empujado a ejercer una actividad hasta ahora desconocida sobre él, la de repartidor. El laureadísimo maratoniano vitoriano de 57 años no ha dudado en llevar en persona los pedidos de su tienda de deportes de Vitoria, Running Fiz. "Ver la cara de alegría y sorpresa a todas esas personas a las que he repartido los pedidos y saber que las he hecho felices... no tiene precio", afirmó el campeón de Europa, campeón del mundo de Maratón, Premio de los Deportes Príncipe de Asturias y en tres ocasiones olímpico (Barcelona Atlanta y Sídney).
Martín Fiz ha recordado sus orígenes con este gesto: "No se me caen los anillos. No reniego de mi pasado. Mi familia migró hasta Vitoria para comprar mis primeras zapatillas y lo he vuelto a recordar al repartir en esta época". No se me caen los anillos. No reniego de mi pasado. Mi familia migró hasta Vitoria para comprar mis primeras zapatillas y lo he vuelto a recordar al repartir en esta época", aseguró en declaraciones al Comité Olímpico Español.
Fue el propio atleta quien recordaba estos días en las redes sociales que solía repartir huevos puerta a puerta cuando era un chaval para pagarse la ropa y las zapatillas: "No faltaba dinero en casa, pero quería aligerar a mis padres la carga económica de las zapatillas y la ropa. Es una manera de volver a los orígenes y de fidelizar a nuestros clientes".
Al recordar sus orígenes, Martín Fiz ha querido acordarse especialmente de los jóvenes que empiezan en el atletismo: "Ha habido un cambio generacional y lo que respecta a mi especialidad el fondo, tanto en masculino como en femenino hay nombres de altura que van a luchar por estar en unos Juegos Olímpico. En otras especialidades como en el 5.000, en el 10.000 o en obstáculos van a tener que luchar mucho. La cantera es muy joven, pero también muy profesional y hay alguna atleta que puede optar a medalla.
Y también tuvo un mensaje para los profesionales, que fijen su mirada en Tokio: "Les aconsejo que retomen los entrenamientos de manera tranquila y calmada haciendo caso a sus entrenadores, porque no va a haber competiciones hasta septiembre, octubre o noviembre. Por lo tanto, que se marquen un objetivo a nivel nacional o internacional, pero que las energías las tengan puestas en Tokio.