Futeu: "Vuelvo para aportar lo que he aprendido en Francia"

-¿Qué tal le va la vida por París (Titi saltó la valla que separa Melilla de África en 2014 procedente de Camerún, donde se enamoró del rugby. Seis años después y tras pasar por ligas universitarias, Majadahonda y Alcobendas, ha fichado por el Stade Français del Top 14, la primera división francesa. Ya nacionalizado por España, es un fijo en los Leones)?

Cuando me fui sabía que iba a ser difícil, duro. Pero tenía que pelearlo. La cosa se ha puesto seria, porque han decidido contar conmigo para el primer equipo (Pieter de Villiers, hasta hace poco entrenador de delanteros del club parisino hoy en el staff de Escocia, fue quien apostó por él y poco a poco se va abriendo hueco en las convocatorias). Va a ser complicado mantenerse, pero no pienso bajar los brazos.

-¿Ha entrado bien en el equipo?

Creo que sí. Tengo futuro allí y me gusta el ambiente. Ahora estamos esperando a ver qué tal con el nuevo entrenador que van a traer (Heyneke Meyer renunció en noviembre y aún no tiene sustituto).

-Y estos meses vuelta a España para estar con la Selección en el Seis Naciones B.

Tenía muchas ganas. Lo echaba de menos. Francia es duro porque allí no tengo vida y amigos como aquí. Estaba deseando jugar con la Selección. Me dolió muchísimo no estar contra Hong Kong y Occitania, pero el club no me dejó. Vuelvo con muchas ganas de aportar lo que he aprendido en Francia para ayudar a ganar el torneo.

-¿Y qué diría que ha aprendido?

He aprendido mucho en la melé pero sigo entrenando. Es cierto que no me gustaba, pero ahora disfruto mucho esa posición.

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-¿Sigue pendiente del Alcobendas?

Claro. Veo los partidos siempre que puedo. También tengo contacto con muchos jugadores.

-Dice que no tiene vida en París. ¿Por qué?

Es que allí mi vida es entrenar, casa, entrenar, casa. No hay ambiente como en Madrid. Me gusta más el estilo de vida español. Hay muchas cosas que hacer en París, pero no es el mismo ambiente, todo el mundo va con prisa… Es raro.

-¿Cómo es su rutina?

Salgo de casa a las ocho y media de la mañana y vuelvo a las cuatro o cinco de la tarde, dependiendo de cómo sea el entrenamiento. Con el cansancio ya no tengo ganas de hacer nada, y además al día siguiente hay que entrenar otra vez.

-¿Vive solo o está con su familia?

Vivo con mi novia. Mis padres siguen en Camerún. Están muy contentos porque he elegido un camino y lo he seguido hasta el final.

¿Se ve mucho tiempo allí?

Yo quiero hacer carrera en Francia. Es una de las mejores ligas. Todo el mundo aspira a jugar allí.