Suecia vapulea a su selección tras la paliza ante Portugal

Este Campeonato de Europa, de nuevo formato y de grandes sorpresas, ofrece controversias casi diarias. El partido de este vierns en Malmoe entre Suecia y Portugal, con un marcador impensable, 25-35, la peor derrota sueca en una fase final de una Eurocopa,acabó con críticas en los dos bandos. Paulo Pereira, el seleccinador portugués, criticó abiertamente a la televisión pública de su país por no ofrecer el campeonato: "No cumple la función que tiene. Yo he llorado con los triunfos de nuestros deportistas, y ahora querría que la gente llorase con nuestras victorias. Lo políticos deberían saber la importancia del deporte en nuestras vidas diarias".

La reivindicación de Pereira tras la segunda victoria más amplia de los portugueses en la Eurocopa (el récord, 11 tantos de diferencia a Israel), contrasta con las críticas abiertas de los suecos a su selección, con el cuarteto de la parranda nocturna, Jim Gottfridsson, Andreas Nilsson, Lukas Nilsson y Kim Ekdachl, en el punto de mira. Ellos no quisieron contestar a las televisiones acerca del incidente, sobre si había influido la salida en su juego. En cualquier caso las grades leyendas suecas calificaron el resultado de vergüenza y humillación.

También los daneses están pagando la humillación de no llegar a la segunda fase. Sus seguidores tratan de revender las 20.000 entradas que tenían adquiridas para los partidos en Malmoe, y ofrecen sus paquetes en las rede sociales ya a la mitad del precio que pagaron por ellas. La Federación de Dinamarca mantiene las invitaciones que tenían prepardas para sus patrocinadores, pero ahora sin el mismo entusiamos con el qie las habían tramitado.

Por su parte, Alemania es una fuente de noticias. Si el país se rio de su seleccionador, Christan Prokop le preguntó en un tiempo muerto a Timo Kastening cómo se llamaba, ante Bielorrusia el equipo salió a jugar en la segunda parte sin Julius Kuhn, al que había dejado encerrado en el vestuario, aunque los gritos del jugado los escuchó un encargado de la seguridad del pabellón y pudo participar en la segunda parte,