Robert Roode reaparece para saldar cuentas con Roman Reigns
Roman Reigns fue brutalmente atacado por Roode, que volvía tras más de un mes fuera de la competición, Corbin y Ziggler en el último episodio de SmackDown.
"Estoy de vuelta", le gritaba Robert Roode al oído a Roman Reings mientras se golpeaba el pecho. La última vez que 'Glorious' estuvo en SmackDown fue el 29 de noviembre y fue humillado por el 'Big Dog' (después Roode fue suspendido 30 días por violar la política de bienestar de WWE). El excampeón no esperaba a Roode, quien rumió durante su ausencia una vengaza. El retorno más esperado, precisamente, era el de los primos de Roman. The Usos (Jimmy y Jey Uso) volvieron la semana pasada para salvar a Reigns de otra afrenta por parte de King Corbin y Dolph Ziggler... pero finalmente el golpe e efecto cayó para el lado de Roode.
Tras lo sucedido hace una semana, la WWE pactó un pleito por parejas entre The Usos y la dupla Corbin-Ziggler. Estaba siendo un duelo entretenido en el que los hermanos samoanos dejaban buenos destellos pese a que llevaban tiempo fuera de la circulación. Todo cambió con la intervención de invitados no previstos. Cuando mejor estaban los Uso, The Revival (Scott Dawson y Dash Wilder) entraron en escena. No hicieron nada, pero su sola presencia descentró a Jimmy y Jey. Fue el momento en el que Reigns devolvió el favor a sus primos. Con un 'Puñetazo de Superman' fulminó a Wilder y Dawson. El 'Big Dog' se quedó merodeando y cuando parecía que no haría nada destrozó a Corbin con una 'Lanza'. Todo pintaba a paliza de los tres primos, pero Roode salió de la nada para atacar a Reigns, quien partió la mesa de los comentaristas con su espalda y acabó sepultado entre los restos de ella. El feudo en desventaja ya está igualado. Robert Roode equilibra la balanza de una historia que continúa en desarrollo.
Otro de los retornos de la noche fue el de John Morrison. El estadounidense tuvo una pequeña aparición la semana pasada, pero este viernes tuvo mayor presencia. Fue el invitado de Miz TV (formó pareja durante mucho tiempo con Morrison) y acompañó a Miz en el ringsite mientras compitió contra Kofi Kingston. El actor perdió los papeles con Kofi la semana pasada y ésta se excuso. Pese a ello, tuvo un pleito, el cual ganó al excampeón. Más tarde, la WWE confirmó la segunda parte de ese feudo que se está creando, ya que el primer combate de Morrison en su segunda etapa en la compañía será la próxima semana en SmackDown contra Big E.
En el capítulo de rivalidades que siguen creciendo encontramos una en el vestuario masculino y otra en el femenino. Daniel Bryan continúa recibiendo mensajes y 'regalos' de Bray Wyatt, quien intenta descentrarlo. Esta semana intentó hacerlo con Rabblin Rabbit (uno de los personajes de la FireFlyFunHouse del ‘Fiend’), quien primero le lanzó un mensaje al aspirante y después apareció con media cabeza. Mientras, en el roster femenino Lacey Evans esperaba a Sasha Banks, pero Bayley fue la que apareció en la pantalla para escusar a su amiga. Evans le reclamó una oportunidad titular a la californiana, pero esta la declinó, aunque ambas acabaron enzarzadas y Bayley, triunfadora.
Otro de los momentos de SmackDown fue el claro mensaje que Braun Strowman envió a Shinsuke Nakamura, al que derrotó en un interesante combate y después alzó su Campeonato Intercontinental. En el otro combate de la noche, Mandy Rose derrotó a Alexa Bliss. Mandy aprovechó que Alexa se distrajo con la salida de ‘The Heavy Machinery’ (Otis y Tucker) para ganar con un paquetito. Por último, en el capítulo de promociones, Elias cantó una canción avisando que el 2020 será su año y Sheamus, desde el backstage, también lanzó un órdago a sus compañeros de vestuario: “Estoy aquí para destrozar a los débiles”.