La lucha de un triple campeón olímpico por volver a caminar
En una entrevista con The Daily Telegraph, el exremero británico Pete Reed, oro en Pekín, Londres y Río, relata cómo lucha para volver a andar tras sufrir una atrofia muscular espinal.
Pete Reed afronta desde el pasado mes de octubre la competición más importante su vida, la de volver a andar después de que sufriese una atrofia muscular espinal el pasado mes de septiembre que le ha dejado con parálisis de pecho para abajo.
Reed, oro olímpico en la categoría de cuatro sin timonel en los Juegos Olímpicos de Pekín 2008 y Londres 2012 y oro olímpico en ocho con timonel en Río 2016, relató en una entrevista al diario The Daily Telegraph cómo está siendo su lucha para poder volver a andar.
El exremero contó al detalle cómo sufrió este episodio el pasado 2 de septiembre, con la Marina Británica, donde ocupa el cargo de teniente, cuando sintió dolores en pecho, piernas y problemas a la hora de andar. "A la mañana siguiente me desperté como Bambi. Intentaba sostenerme en pie con las manos. Caminé a la ducha y era incapaz de orinar. El médico me dijo 'Esto es preocupante, vete al hospital'. Estaba con el uniforme, no sabía si salir. Después de una resonancia y un escáner sospecharon que había sufrido una pequeña atrofia muscular espinal. Me dieron una aspirina y me mantuvieron en observación. Dos días después, mi pierna parecía mejorar y podía levantar las piernas. Uno de los pacientes me dijo que no estaba lo suficientemente enfermo para estar ahí. No me sentía mal y pensé que podría regresar a mi vida normal. Pero entonces me ocurrió lo mismo en el mismo sitio de la columna. Esta vez la intensidad fue mayor. Fue un dolor extraordinario, seguido de un adormecimiento total".
Reed relató que ya ha aprendido a convivir con este tipo de dolencias que suelen ser más dañinas en personas con las arterias obstruidas, con obesidad o problemas del corazón. "Hay dificultad para preguntarse '¿por qué yo? ¿qué he hecho mal?' Miro para atrás en mi vida y he hecho cosas valientes y audaces. He sido muy afortunado, por mi forma de mover el cuerpo. Si me hubiera lesionado de esa forma, habría sido duro vivir con ello porque habría sido mi decisión escalar rocas o altos muros".
El remero explicó que los avances en su recuperación están siendo difíciles. “Los músculos aún están flojos, puedes ver cómo se estiran pero no es suficiente para generar un vatio. Puede parecer tonto que lo diga, pero siento que tengo equilibrio en cuanto a actitud positiva y realismos. No quiere decir que vaya a correr maratones o subir montañas de nuevo. Algunas cosas, como volver a la Marina, están casi descartadas. ¿Podré caminar de nuevo? No lo sé, pero lo intentaré".
Reed está realizando esta recuperación en el Salisbury District Hospital y mira con optimismo la situación. "La gente aquí es muy valiente. Tengo mis manos y mi cerebro aún funciona. Otros no tienen tanta suerte. Mi lesión fue en la sección de la T6/T7 de la columna vertebral. Si hubiera sido cinco vértebras más arriba sería tetraplejía. No controlaría mis brazos o el diafragma. Tengo que estar agradecido por lo que tengo todavía". El remero recalcó el papel decisivo de su familia a la hora de luchar. "El apoyo de mi entorno me ha inspirado a salir de la cama, afeitarme y enfrentarme el fracaso y los desafíos. Lo que me pasó fue horrible y no lo pude elegir, pero podría ser peor. Y creo que puedo lidiar con ello".