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PREMIOS AS 2019

"Estos homenajes a mi padre son un orgullo; no se le olvida"

Luis Aragonés estuvo en casi la mitad de las 90 Ligas disputadas: 40. Sus hijos Moqui y Luis recogieron el Premio AS 2019 en su nombre.

RAFA APARICIODIARIO AS

"La palabra fútbol en el diccionario tendría que llevar al lado la foto de Luis". La frase es de Xavi Hernández, ayer en la voz de Dani Garrido, presentador de los Premios AS 2019. Un silencio emocionado llegó a continuación. Llegaba uno de los premios más especiales de la noche: a la figura de Luis Aragonés. Casi la mitad de las Ligas, 90, llevan su nombre, 40, 15 como jugador, 25 como entrenador, huella imborrable, en tres clubes como jugador y ocho como entrenador con un club que sobresale entre todos los demás. El Atlético. Le brindó su vida, le latía en la sangre.

Unos números cuyo recuerdo arrancaron un aplauso sentido en la sala. A continuación una mujer se levantó de la mesa 3 del salón del Eurobuilding en el que se celebraba la gala. Era Moqui, su hija, María José Aragonés. Acudía junto a su hermano, Luis a recoger el galardón. "Hace cinco años que mi padre se fue y, aunque al principio lo pasamos mal, muy mal, cinco años después recibir estos homenajes nos llena de orgullo. Él estaría orgulloso. No le olvidan", había agradecido en la alfombra roja antes. Cinco años después, su sabiduría sigue alumbrando. Del "ganar, ganar o ganar" a "Y usted no pise ese escudo" pasando por aquella que aprendió en esas 40 temporadas de Ligas: "Se resuelven en las diez últimas jornadas".

Durante toda la tarde su nombre estuvo en muchas conversaciones, en tantos recuerdos, en la emoción con la que Pepa, Luis y Moqui llegaron a la Gala de AS. Era el de Luis Aragonés el primer nombre de los cinco para homenajear los 90 años de LaLiga. "Espero que en la Eurocopa su espíritu esté presente y ayude a ganar y se vuelva a la época gloriosa de la Selección", había dicho Moqui antes en la alfombra roja. Porque Luis se fue en 2014 aunque nunca lo hará del todo. Es imposible. Es eterno. Siempre lo será. A eso se refería Xavi en su frase.