Álvarez Aznar, con Seringat en el Gran Premio de Madrid
"Rockfeller tiene que descansar; lleva cuatro torneos seguidos compitiendo", asegura el madrileño, baza española para estar en los Juegos
El madrileño Eduardo Álvarez Aznar (35 años) es la única baza española para estar en el concurso de saltos en los Juegos Olímpicos de Tokio. El billete se lo puede dar el ranking mundial, y en Madrid, el domingo en el Gran Premio de la Copa del Mundo del Horse Week en el IFEMA, puede sumare puntos para conseguir ese reto.
-¿Qué importancia le da a la prueba de Madrid para estar en los Juegos?
-En Madrid intentaré hacer un buen papel primero porque soy madrileño y compito en casa; segundo, porque es importante de cara a estar en la final de la Copa del Mundo; y luego está en ranking para los Juegos.
-Usted marcha bien.
-El ranking es combinado, se puntúa al jinete y al caballo. Con Rockefeller ocupo la segunda posición, pero no competiré con él en Madrid, Lleva cuatro semanas seguidas saltando y ahora necesitaba descanso. Lo haré con Seringat, con el que estoy en quinta posición en el mismo ranking. Hay dos plazas en juego, a la que competimos el segundo, el tercero y el cuarto, porque el primero está muy destacado. Yo, en principio, tengo dos opciones.
-¿Cuándo vuelve a saltar con Rockefeller?
-Dentro de dos semanas, en el Gran Premio de A Coruña, séptima prueba de la Copa del Mundo.
-¿Son muy diferentes sus dos caballos?
-Como la noche y el día, por carácter, por la manera de monta que necesita cada uno, por temperamento. No, no se parecen.
-Este mismo viernes prueba a Seringat en el recinto del Ifema. ¿Es necesario este entrenamiento previo para un caballo como el suyo?
-Los recintos son diferentes, y los caballos se tienen que adaptar, a la luz, a los colores, al ambiente. Ellos también necesitan sentirse cómodos. Por eso se suelen probar, más que por el recorrido por todo lo que rodea a la competición.