"De mar a mar", el deporte inclusivo cruza los Pirineos
La Fundación A La Par y Tressis han estrenado el documental sobre la experiencia de deportistas con discapacidad intelectual en las siete etapas de la Transpyr
Cruzar los Pirineros para demostrar que los discapacitados intelectuales pueden conseguir cualquier objetivo. Es esta la filosofía por detrás de la iniciativa de Tressi y de la Fundación A La Par, que han reunido a 56 personas para enfrentarse a la carrera conocida como Transpyr, dividida en siete etapas que cubren los más de 800 km y casi 20.000 metros de desnivel ascendido que separan el mar Mediterráneo del Cantábrico.
El documental "De Mar a Mar", estrenado el pasado martes, relata este desafío, en el que los participantes han recurrido de media 740 kilómetros. Tras lograr el derecho al voto en la últimas dos elecciones, los discapacitados intelectuales demuestran, como sostiene en el documental el director técnico Miguel Silvestre, que "van muy por delante de la frontera totalmente política y social entre la discapacidad y la no discapacidad que marcamos nosotros y la sociedad".
Son personas "sin estrés, sin complejos y sin envidias. No tienen las tres grandes enfermedades que el resto de la sociedad sufrimos, en mayor o menor medida", añade Silvestre. Y el entusiasmo con que se miden a este reto se manifiesta en sus caras y en sus risas, como en la de Sergio García, en formación laboral con la Fundación A La Par: "Desde el minuto uno de la salida de la primera etapa fue emocionante. Esto es una maravilla y además con este equipo. Cruzarse los Pirineos es lo mejor".
Al final fueron 14.800 los kilómetros totales del equipo, como la distancia entre Madrid y Sidney. Un esfuerzo "extraordinario" como la canción que Jorge Ruiz, del grupo Maldita Nerea, ha compuesto en homenaje a los deportistas y para la que confiesa haber encontrado la inspiración en las “capacidades distintas de personas asombrosas, como las que conocí durante las etapas que compartí en la carrera.”