Beterbiev, rey del semipesado: noquea a Gvozdyk en 10 asaltos
Artur Beterbiev unificó los Mundiales WBC e IBF del semipesado tras ganar por KO en el décimo asalto a Oleksandr Gvozdyk. La pelea estaba siendo igualada.
Artur Beterbiev no quiso dejar ninguna duda en el Liacouras Center de Philadelphia. Antes de su combate con Oleksandr Gvozdyk las apuestas estaban igualadas, nadie se atrevía a hacer ningún pronóstico y ambos cobraron lo mismo (1,5 millones de dólares). No había favorito. Una vez que sonó la campana tampoco dominador. Pelea igualada y cerrada que podía decantarse para cualquier lado... pero Beterbiev lo evitó. El ruso, de 34 años, hizo un trabajo de demolición y lo logró finalizar en el décimo asalto. Hasta tres veces tuvo que tirar a su oponente a la lona para derrotarle. Fue un duelo de titanes, pero solo podía quedar uno y Beterbiev es el nuevo campeón unificado (WBC e IBF) del semipesado. El rey.
La tónica de la pelea fue la misma desde el primer asalto hasta el décimo. Beterbiev tomó el centro del cuadrilátero, metió presión y Gvozdyk, con su mayor movilidad, pegaba y salía de la distancia. Esa estrategia le funcionó bien en los aslatos iniciales, pero conforme pasaban los rounds el cansancio le hizo plantarse más. Pese a ello, poco varió el rumbo del pleito. Ambos tienen un estilo muy marcado. El primer round tuvo polémica, ya que Gvozdyk se fue al suelo tras un empujón (precedido de un toquecito). El árbitro realizó una cuenta de protección, pero se dio cuenta de su error y lo avisó a la mesa antes de comenzar el segundo round.
Beterbiev y Gvozdyk intercambiaron golpe por golpe de manera constante. Más rápido el ucraniano y más contundente el ruso. Ahí estuvo la clave de la pelea. Ninguno parecía notar el castigo de su rival... pero con la acumulación Gvozdyk lo acusó. En el octavo asalto, tras un cruce terrorífico, el ucraniano comenzó a evidenciar el castigo. Se rehizo en el noveno, aunque con un jab y un crochet de derecha a la sien puso la rodilla en el suelo. Se levantó, pero estaba realmente tocado y todavía faltaba mucho asalto. Beterbiev lo vio, apretó y con el mismo golpe (que blocó en parte) logró otras dos caídas. Quedaban menos de diez segundos, pero estaba KO y el referí detuvo el choque. Golpe de autoridad de Beterbiev para alzarse con el trono del semipesado.