La Carrera de la Ciencia, 40 años de una clásica "necesaria"
Este domingo (09:00) vuelve a las calles de la capital en su 39ª edición, manteniendo su recorrido clásico de 10 kilómetros y con cerca de 3.500 inscritos.
"La vinculación entre ciencia y deporte tiene que existir", contaba Alicia Martín, directora de Deportes del Ayuntamiento de Madrid, este jueves en la presentación de la Carrera de la Ciencia. Y ese es, precisamente, el vínculo que aspira a mantener la prueba auspiciada por el CSIC (Consejo Superior de Investigaciones Científicas, de 80 aniversario este año), que vuelve este domingo, desde las 09:00, a las calles de Madrid con su 39ª edición.
Son 40 años ya (la primera edición tuvo lugar en 1979) de una carrera que nació para fomentar la práctica deportiva entre científicos. La idea, de Francisco Cisneros, tuvo predicamento en varias de sus compañeras en la institución, unas "pioneras" que fueron homenajeadas este jueves. El calificativo lo puso Pilar Herranz, una de ellas, que contaba que se sintió así aquella mañana de finales de los 70 en que decidió ponerse las zapatillas y salir a correr junto a Concha Arranz, Manuela Torres, Alicia Fernández, Manuel Según, Jesús Martín San Emeterio o Fernando Armesto.
Varias décadas después la prueba ya tiene aroma a clásica, con un recorrido asentado que arranca y termina en el número 117 de la Calle Serrano, sede del CSIC, tras pasar por Recoletos, la Castellana, Alberto Alcócer... Hay inscritas cerca de 3.500 personas este año y hará acto de presencia Javier Gómez-Noya para dar la salida y asesorar a los participantes en un reto de Bridgestone que se enmarca dentro de la carrera.
Dirige el cotarro Carlos Cisneros, heredero del proyecto de su padre Francisco, que recalcó la buena relación de la cita con "el medio ambiente" y agradeció al CSIC, Ford y AS, diario oficial, la ayuda: "Esta carrera no habría llegado hasta aquí sin ellos". Junto a Cisneros, que pone como favoritos a Sergio Salinero y Cristina Giurcanu, comparecieron Javier Odriozola, director de Deportes del consistorio madrileño en la corporación anterior, o Jaime Lissavetzky, expresidente del CSD entre otros cargos.
Ciencia y deporte, "dos disciplinas que tienen que formar parte de la cultura española" según Pilar Tigeras,vicepresidenta del CSIC, se mantienen unidas desde hace 40 años en un proyecto que, confesaba Alicia Martín, "es tan bonito que hay que apoyarlo siempre".