Boschiero doblega a un valiente Iván Tomás en Florencia
Devis Boschiero se impuso por TKO en el octavo asalto al español Iván Tomás. Ganó el IBF Interncontinental del superpluma tras una parada médica.
Iván Tomás no tuvo la noche deseada en Florencia. El español, de 26 años, decidió jugarse su invicto en un duro combate ante el excampeón continental Devis Boschiero. El camino era difícil y Tomás dio la cara, pero acabó perdiendo por TKO en el octavo asalto tras una parada médica por uno de los cortes que el catalán tenía en su cara. Boschiero, de 38 años, se engancha así a su último tren para alcanzar un gran cartel, ya que además del triunfo se alzó con el cinturón IBF Intercontinental del peso superpluma (cinturón intermedio de ese organismo).
La pelea empezó con el italiano con una marcha más. El español es un púgil diesel y fue cogiendo su ritmo poco a poco. En los dos primeros asaltos le tocó capera el temporal como pudo, pues Boschiero quería gustar y sacó muchos golpes. Tomás no era capaz de imponer su envergadura y aunque metió movilidad se vio sobrepasado por el empuje del local. Los golpes rectos de el excampeón de Europa entraban fácil y desde el segundo acto el crochet de derecha también comenzó a entrar. Con uno de ellos, precisamante, le produjo el primer corte. Además, en la corta distancia, Boschiero dejaba clara su experiencia. Se aprovechaba de sus codos para abrir espacios y siempre conectaba las manos más duras.
El gas, a ese ritmo, le duró al italiano hasta el quinto asalto. En ese momento bajó el pistón y Tomás emergió. El español fue valiente, pese a que sufría en la corta nunca le rehuyó. Con el boxeo más pausado, Tomás empezó a sacar más trabajo. Esperó a contragolpear Boschiero, que mostró una precisión de cirujano siempre. El único debe en la cuenta del italiano fue la cabeza, entraba con ella por delante y podía abrir más aun los cortes del español (que acabó con tres grandes). Eso pasó en el octavo, pero antes, en el séptimo, Tomás y Boschiero se quedaron en la media-corta distancia y de nuevo el dominio era del italiano.
Pintaba mal, pero nunca se bajó los brazos el catalán. Siguió boxeando, intentado sorprender con golpes ascendentes, que le fueron dando resultado. Tras un cabezazo involuntario, a Tomás se le abrió más la brecha en su ceja derecha, el médico subió y paró el combate. El árbitro decretó TKO, mientras Iván Tomás se quejaba porque la acción clave no fue por un golpe. Cayeron en saco roto sus protestas, pero el resultado final no hubiese variado. Tomás se dejó el invicto en Florencia, pero con 26 años, este duelo fue solo el comienzo.