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BOXEO

Menayothin gana con polémica a Fukuhara y se pone en 53-0

Wanheng Menayothin retuvo por undécima vez el Mundial WBC del peso mínimo al derrotar a Tatsuya Fukuhara. Fue superior, pero detuvieron la pelea por un corte dudoso.

Wanheng Menayothin golpea a Tatsuya Fukuhara durante su combate el 31 de mayo de 2018.
WBC

En el octavo asalto del combate entre Wanheng Menayothin y Tatsuya Fukuhara por el Mundial WBC del peso mínimo el árbitro pidió la asistencia del médico. El galeno de la pelea debía examinar el corte que el campeón, Menayothin, se había hecho encima de su ceja derecha tras un cabezazo fortuito de Fukuhara. Tras hacer las veces de cutman (algo prohibido, sólo debe limpiar), el doctor le mostró una tarjeta roja al referí, la pelea se paraba. La decisión sorprendió al colegiado, quien no creía que fuese para tanto. Más aun cuando Fukuhara se cortó en su párpado (por otro cabezazo) en el segundo asalto y tras revisarlo en el sexto le dejó continuar. La ventaja de pelear en casa, pero que en esta ocasión deslució el trabajo de Menayothin. El púgil con mejor récord de la historia sigue ampliando su legado. Ganó por decisión unánime (79-73, 78-74 y 78-74) y se sitúa con un registro de 53-0 (18 KO).

Menayothin debía recortar envergadura y lo hizo de inicio. Apretó, acortó distancia y en el cuerpo a cuerpo siempre encontró los huecos para dañar con claridad a Fukuhara, que no fue capaz de frenar lo que le llegó de inicio. El corte que tenía en su párpado el japonés hizo que en el cuarto asalto el campeón echase el freno. Sabía que si la pelea se paraba el duelo sería decretado nulo, y se le iría al traste su inmaculado récord. Ahí emergió el aspirante, que aprovechó su envergadura para percutir desde la distancia, variar los planos y hacer retroceder al tailandés. El quinto acto fue igual, aunque Menayothin apretó al final, conectó varias manos a la contra y cambió, de nuevo, el ritmo del combate.

Desde ese momento Menayothin empezó a lucir como suele hacerlo. Dejó maravillado al público con su velocidad a la hora de esquivar los golpes con su cintura, blocó, pasó por debajo del jab de Fukuhara de manera constante y le conectó la derecha recta siempre que quiso. A la contra estaba exhibiéndose el campeón. El japonés, por su parte, comenzaba a verse desbordado y desde el séptimo round se fue adelante con todo. Arriesgaba más, recibía más y su cabeza era un peligro. El choque parecía inminente y tras encajar un brutal crochet de derecha, Fukuhara entró en la corta distancia y cortó al campeón. Podía haber resistido, pero el campeón habló con el médico y hacía gestos de dolor en su ojo. Tenía tiempo, por reglamento, para recuperarse, pero el galeno no dejó opción a ello. Paró la pelea, de manera precipitada, y puso un nuevo tick verde en la carrera de Menayothin. Pese a la polémica, el 'Enano Gigante' cada vez es más grande.