Coral Bistuer, pionera del taekwondo en España
Ganó seis títulos europeos, uno mundial y dos medallas olímpicas, oro (Barcelona) y bronce) Seúl cuando sólo era deporte de exhibición
España es actualmente una de las potencias mundiales de taekwondo, el deporte nacional coreano que entró definitivamente en el programa olímpico en el año 2000. Antes había sido deporte de exhibición en Seúl (bronce sin ganar un combate) y Barcelona (oro), y en ambas citas España ya tenía una competidora destacada, la madrileña Coral Bistuer.
A sus 54 años y madre de dos hijos, Coral mantiene una relación a distancia con la élite de lo que fue su deporte, pero sí sigue relacionada con las clases que imparte en algunos colegios de Madrid, y ahora practica un deporte menos violento, como el pádel, sin olvidarse de lo mucho que le gusta la modalidad de contacto.
Madrileña, de Argúelles, llegó al taekwondo de la mano de su hermano, pero se ve que ella tenía madera de campeona, y a los 17 años ya era la mejor Europa, que lo sería en seis europeos diferentes y también campeona del mundo, y otra vez plata.
Tras los Juegos de Barcelona se fue desligando de la competición enfocando su carrera profesional hacia otros derroteros, televisión, publicidad, de todo, porque Coral siempre trascendió al mero deporte.
En los ochenta fue uno de los rostros femeninos más reconocidos del deporte español, y siempre mostró su talante reivindicativo en la Selección, lo que le valió más de un enfrentamiento con los directivos de la Federación Española. Y por eso su trayectoria abrió el conocimiento del taekwondo en España, y su forma de ser sirvió de ejemplo para mantener la lucha femenina por igualarse en derechos a los deportistas.