Vall: “Las mínimas son más una mochila que un reto”
Solamente tres nadadores cumplieron los requisitos de la RFEN. La medallista mundial se quedó fuera de Gwangju, aunque deberán respecar nadadores.
Solo tres nadadores cumplieron con los criterios de selección que impuso la dirección técnica de la RFEN para acudir al Mundial de Gwangju: Mireia Belmonte (800 y 1.500 libre), Jimena Pérez (1.500) y Marina García (200 braza). Un balance pobre que ha despertado la preocupación entre los nadadores y la desilusión, también la reflexión en la Federación sobre qué ha fallado y cuál es el mejor camino a menos de un año y medio de los Juegos de Tokio 2020.
Una de las voces autorizadas es Jessica Vall, siempre infalible menos en esta ocasión. Su récord de España en los 50 braza en la primera jornada atestigua que su estado de forma era óptimo, aunque sus marcas no han estado a la altura de lo que se exigía. “En lugar de un reto, las mínimas son una mochila. Es como si estuvieras sola en la piscina, porque yo no tengo la sensación de competir contra el cronómetro, yo quiero llegar la primera a mi prueba. No sabes cómo vas y es estresante...”, apuntó. También Marina García, quien sí logró el billete, reflexionó sobre ello. “No diría que se hace bien o mal, pero es diferente a Estados Unidos u otros países. No tenemos tanta gente en el alto nivel. Supongo que ahora lo valorarán y sacarán conclusiones. Poner mínimas exigentes lleva a que la gente persiga a Mireia y a que se acerque a sus límites, pero también comporta cosas malas”, comentó.
La mejor versión de la nadadora del CN Sabadell
Al margen de Mireia, la nadadora más sólida de este campeonato en Sabadell fue Marina García, quien consiguió la mínima en las eliminatorias, la semifinal y la final de los 200 braza, nadando en 2:25, un buen tiempo para la época del año con el reto del Mundial. “Quería centrarme en hacerlo bien aquí y luego mi objetivo es intentar poder nadar la final en Gwangju”, comentó.
Después de que finalizara sus estudios en EE UU, la nadadora del Club Natación Sabadell reconoce que no se quiere comparar con la de 2013, cuando fue quinta del mundo. “Ahora tengo más experiencia y un mejor aprendizaje. Estoy en mi mejor versión”, dijo.