El Logroño se despide de Europa con un triunfo de mérito

El Logroño La Rioja jugó este sábado su último partido de la Copa EHF y se despidió de la competición continental con un buen sabor de boca, con un triunfo ajustado (29-28) ante el Saint Raphael francés, subcampeón del torneo, que necesitaba un triunfo para liderar el grupo. Pero pese a esa necesidad y a la calidad de su plantilla el equipo francés no hizo un buen partido, no contrarrestó el ritmo de los riojanos y lo pagó con la derrota.

El equipo español comenzó el partido con una alineación casi inédita, sin sus principales referentes, con el objetivo de ver cómo asumían la responsabilidad los más jóvenes ante un rival de muchos quilates. Y tras un inicio frío, el equipo riojano empezó a mandar en el partido porque fue el que más interés tuvo en ello en los primeros minutos.

Además, poco a poco fue dando entrada en el campo a sus titulares y gracias a ello siguió por delante de un Saint Raphael con menos ritmo aunque de vez en cuando daba muestras de una grandísima calidad guiado por Dipanda, Simiku y Lynggaard. Pero solo ellos tres no lograron compensar el mayor ritmo que aportaban los riojanos, que llegaron a jugar con dos centrales en pista, Balenciaga y Kukic, con los que alcanzaron una máxima ventaja de tres goles (13-10) que se quedó en uno al descanso (15-14).

En el segundo tiempo el equipo francés metió más intensidad defensiva al encuentro, que se equilibró, y los empates se sucedieron en el marcador. Daba la sensación de que el Logroño era el equipo que más quería ganar y ponía más ambición; y también de que el Saint Raphael podía hacer más de lo que mostraba.

Pero en la recta final fue el equipo riojano el que dio un paso adelante, tanto en defensa como en ataque, con un Ilic a un gran nivel. Así alcanzó su ventaja más clara (29-26) a menos de cinco minutos y sólo entonces el Saint Raphael despertó. Tanto que se colocó 29-28 con dos minutos y medio por jugar.

Ilic, en un penalti, y Scott fallaron las dos ocasiones más claras de los locales para "matar" el encuentro, pero luego lo consiguieron con una buena defensa.