Husillos vuelve a ser 'misil' y entra en la final europea de 400

EI Misil de Astudillo, Óscar Husillos, gritó de rabia al ganar su semifinal de 400 en los Europeos bajo techo de Glasgow en los que hoy luchará por las medallas (21:22). Se golpeó en el pecho: “¡Sí. Vamos! Exploté de rabia, lo hice bien”. Había superado la ansiedad de las series de la mañana y firmó su mejor carrera del año como él denomina: “Made in Husillos”. 46.31 y la calle libre dominada de manera poderosa. Hasta la meta. “Tenía que salir fuerte y correr mucho hasta la última curva”.

Este Husillos se aproxima más a la versión de 2018, en la que entró primero a meta en el Mundial y después fue destronado por pisar la línea. “A veces se pasan por la mente cosas que hacen que la cabeza esté en otra lado, pero gracias a mi entorno las he superado”, contaba Husillos, de 25 años, que seguía: “Este Óscar es el que se tiene que ver en la final”.

Le espera el noruego Karsten Warholm, actual campeón mundial al aire libre en 400 vallas, pero que es un obús también en liso (45.50 este invierno). “Si quiero pelear por una medalla tengo que correr así, sé que Warholm también sale muy rápido. Puede pasar cualquier cosa, si cojo yo primero y le freno, a lo mejor le rompo el ritmo o me chupa rueda y me pasa. Consultaré con la almohada”.

Junto a él estará en la final su amigo Lucas Búa, que ya estuvo en la de Belgrado 2017 y se clasificó por tiempos (46.81). Un testigo para la posible redención de Husillos.