Los Hispanos llevan al Mundial 800 kilos de material deportivo

Juan Caamano, delegado de la Selección y responsable del material deportivo de los Hispanos, ya está de camino al Mundial. Este martes se ha despedido del grupo poco antes del almuerzo, porque él viaja por carretera a Múnich, donde tiene previsto llegar por la tarde del miércoles, más o menos a la hora que debe aterrizar el resto del equipo de Jordi Ribera.

No se trata de que Caamaño tenga fobia a los aviones, sino, simplemente, que "no se pueden llevar 800 kilos de material deportivo en el avión", asegura el zaragozano, director deportivo de la Federación Aragonesa, que lleva seis años en la Selección.

En las bolsas que van el la furgoneta AVIS (uno de los patrocinadores de España), van balones de juego para los entrenamientos, ropa de entrenamiento, los uniformes de los partidos de cada jugador, nueve para cada jugador (tres de cada uno de los tres con que viste la Selección), y además de los serigrafiados, también juegos sin nombres de las cinco tallas diferentes de los jugadores para reponer en función de los que se vayan rompiendo durante el campeonato.

Es más, por si acaso, y como previsor, Caamaño también se lleva los uniformes de Sergey Hernández y Abel Serdio, por si acaso tuviesen que entrar de manera urgente, y de ellos ya tiene las camisetas con los nombres en el dorsal.

Más aún, en la furgoneta también se transporta el botiquín imprescindible del médico de la Selección, Juanjo Muñoz Benito, que también ocupa una parte importante juntos con los uniformes de juego y de paseo de la Selección. "Viajar así parece un engorro, pero tener la furgoneta en Alemania y nuestra libre disposición luego nos da mucha libertad para no depender tanto de la organización", asegura Juan, uno de los tipos que cuidan de esos detalles que sólo llaman la atención cuando salen mal.