Las Leonas logran a lo grande el billete para el Europeo

Tres ediciones después, tras seis años en blanco, la Selección femenina regresa a un Campeonato de Europa, y por la puerta grande. Porque esta tarde, en la quinta jornada de su liguilla de seis partidos, ganó en Rumanía a domicilio, el rival que le discutía el liderazgo del grupo, con lo que las Leonas convierten en una fiesta el choque del día 9 ante Letonia en Guadalajara, que cierra este preeuropeo.

Rumanía había derrotado a España en la segunda jornada de la liguilla, la única derrota en cinco encuentros, y además de manera concluyente. Por eso el choque de Alexandría era una partido a vida o muerte: la victoria daba el billete al Campeonato; la derrota complicaba el viaje. Rumanía estaba en la mista situación, y se impuso en el primer set por 25-22, en el que las jugadoras de Pascual Saurín tardaron en entrar en juego, aunque gracias al bloqueo maquilarían las diferencias tras media hora de manga: 25-22.

Pues bien, tras dos horas de partido España cantaba victoria con ese agónico 2-3 que tuvo todo tipo de vicisitudes. Por ejemplo, fue capaz de remontar con un 16-25 elocuente en la segunda manga, y un sufrido 23-25 en la tercera. Pero Rumanía reaccionó (25-21) para forzar el quinto, un desempate a 15 puntos sin un favorito claro, con el ambiente a favor de las locales en la pista de Alexandría.

Otras veces las Selección femenina se acobarda, pero esta vez no, y en una manga igualada, en la que cada error se paga con sangre, fue capaz de ganar por la mínima, con sufrimiento y con el épica: un 13-15 que vale volver a la élite.