Berchelt, ante el "hambre" de Micky Román y su "fragilidad"
Los dos mexicanos se cruzan este sábado en El Paso (Texas) por el Mundial WBC del peso superpluma. Berchelt quiere disipar dudas sobre su "fragilidad de quijada".
En la frontera. Ahí pelea Micky Román (60-12, 47 KO). Lo hace literalmente, ya que se cruza este sábado con Miguel Berchelt (34-1, 30 KO) por el Mundial WBC del superpluma en El Paso, ciudad estadounidense que hace frontera con México. Pero también lo hace de manera filosófica. El bregado púgil de Ciudad Juárez ha hablado en la previa de su momento actual. Llega tras ganar y noquear a sus últimos cuatro rivales, pero tiene claro que "esta puede ser su última oportunidad". "Lo tengo claro, voy con todo. Hice una gran preparación, un gran campamento y lo vamos a demostrar el sábado", revela. No se lo pondrá fácil a su compatriota (nacido en Cancún), algo que el campeón tampoco duda.
"Me debo cuidar de su hambre de ser campeón. Cuando peleé contra el Bandido Vargas (combate en el que se proclamó campeón) llevaba ese hambre, el sueño anhelado. Creo que es lo más peligroso que tiene Micky", apunta Berchelt, aunque avisa: "Pienso bajar del ring con mi cinturón". Los dos mexicanos prometen guerra, algo que nadie duda. Cuando se produce ese choque siempre se da un gran espectáculo. Dos pegadores, que disfrutan metiendo ritmo e intercambiando. La capacidad de encaje será clave.
Román aseguró que Berchelt tiene poca, y éste le replicó. "Es lo único que se me puede criticar. Pero he cambiado mi forma de entrenar. Recibí golpes duros de Miura y Bandido. No me movieron. Sé que mis golpes llevan mucha potencia. Creo que mi récord habla", espetó. La clave de la pelea está ahí. Berchelt es más completo y tiene una mayor contundencia. Ha ganado 13 de sus últimas 14 peleas por KO. Un rodillo. Román sabe que no debe arriesgar, y quiso despejar dudas antes de la pelea. "Se verá un Micky diferente, no tan alocado. Sabiendo lo que busca y con estrategia", apuntó.
Pese a ello, el favorito es el campeón. Ha demostrado más y tiene pocas fisuras en su boxeo, aunque también debe ir con cabeza. La experiencia de Román es mucho más amplia (tiene más del doble de combates y casi cuadriplica sus asaltos) y puede ser determinante en un duelo duro, si se alarga, como se espera. La pegada está del lado de Berchelt, que quiere seguir demostrando que es uno de los mejores del mundo. El Alacrán va a por todas.