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ATLETISMO

Samba: "Espero ser un ídolo del atletismo como fue Bolt"

La gran sensación del 400 vallas atendió a As en Doha (Qatar), la ciudad que el próximo año será sede del Mundial de atletismo: "Deseo hacer el récord del mundo en el Khalifa Stadium".

Samba: "Espero ser un ídolo del atletismo como fue Bolt"
Comité olímpico de Qatar

A pocos kilómetros de las aguas del Golfo Pérsico y del futurista downtown de Doha (Qatar) está el ultramoderno centro Aspire. En la pista cubierta hay una foto gigante de Edwin Moses. “A ver cuándo ponen también una mía”, dice a As el descarado Abderrahman Samba, la sensación qatarí del 400 metros vallas, que en 2018, con 46.98 en París, ha superado el crono del mito Moses (47.02). Es el segundo de la historia que rompe la barrera de 47 tras el récord de Kevin Young en Barcelona 1992 (46.78).

“No había nacido cuando hizo esa marca, Kevin me dijo en Instagram: ‘Bienvenido al club’. Espero superar su récord, siempre lo soñé, deseo que sea en 2019 en el Khalifa Stadium, en los Mundiales de Doha”, firma Samba, de 23 años, feliz y risueño. Tiene el nombre heredado de su abuelo y es un corredor alto de planta finísima y look futurista para una prueba que requiere “ritmo, velocidad y sufrimiento”.

“Nací en Mauritania en 1996 y crecí en Medina (Arabia Saudí) una ciudad más religiosa que deportiva. Las condiciones no eran las mejores y encontré un futuro en Qatar. Fue una decisión difícil”, relata el atleta que obtuvo la nacionalidad qatarí en 2015. Su primer 400 vallas fue en 2017, pero su irrupción ha sido un relámpago. “Hacía 200 y 400. Conocí a Hennie Kotze, mi entrenador, en un stage en Sudáfrica y probé a entrenar con los chicos de 400 vallas. Me dijeron: ‘¿Qué haces aquí?’ Pero competí y a la primera hice 50 segundos. Me admitieron”, se ríe Samba.

En poco tiempo, pasó de tener moratones en las tibias a volar en la valla: “Al principio me golpeaba. Ahora nada, me parece algo natural, sencillo”. Un diamante pulido con intensos estudios biomecánicos en el centro Aspire, donde ha aprendido inglés. “No mucho, me defiendo. Español también sé, ¿cómo estás señor?”, imposible poner serio a Samba, con un raro anillo con contador “para las series o lo que sea”: “Me relaja”.

Samba se ve espoleado por el buen momento del 400 vallas, con Warholm, McMaster, Copello, Benjamin… “El nivel es altísimo, pero yo hago siempre mi carrera, a mi ritmo”. En el Khalifa Stadium se busca ocupante al vacío de Bolt: “Puedo ser yo, espero ser un ídolo del atletismo como Bolt”. Ya es mejor que Moses.

En dos años, mejor que Edwin Moses

“La primera vez que competí como internacional fue con Qatar”, cuenta Samba que en menos de dos años está a dos décimas del récord del mundo de Young. “Siempre fue mi sueño”. “Mi entrenador me habla siempre de Edwin Moses, que corrió por debajo de 48 en 29 ocasiones. Yo esta temporada lo he hecho ocho veces y tengo 23 años”.

¿Quiénes pueden ser los sucesores de Bolt en Doha 2019?

Noah Lyles: El estadounidense Noah Lyles, de 21 años, baila shootdance cuando acaba sus carreras de 200, pero además las hace muy rápidas. En 2018 corrió hasta cuatro veces por debajo de 19.70 (19.65) y se maneja en los registros de Bolt a su edad. Show y velocidad son las armas de Speed Racer Lyles. Jakob Ingebrigtsen: Con 18 años, este noruego ya fue en Berlín campeón de Europa de 1.500 y 5.000. Jakob Ingebrigtsen tiene los referentes de sus hermanos mayores Henrik y Filip que se entrenan con su padre Gjert. Su carrera deportiva es un reality de la televisión noruega. En Doha puede grabar una capítulo estelar. Mondo Duplantis: Otro niño prodigio. A los 18 años voló 6,05 en pértiga y ganó el oro continental en Berlín. Nacido en Nueva Orleans, compite con Suecia por su madre. Desde los tres años ya saltaba en el cajetín que le fabricó su padre. Todavía amateur (no gana dinero en premios) si no es el nuevo Bolt, será el nuevo Bubka. Sydney McLaughlin: Como Samba, especialista en 400 vallas. La estadounidense Sydney McLaughlin, de 19 años, tiene la mejor marca del año compitiendo en la NCAA universitaria. Las firmas se rifaban hacerle un contrato de muchas cifras y esta temporada será profesional. En Doha será uno de los grandes focos.