El Galleguito apadrina el ardiente Open de Lugo del WPT
Juan Martín Díaz, con la mejor pareja del momento, Vanesa Alonso y Lara Mendez, los invitados en la presentación del torneo gallego
Todos los jugadores argentinos del World Padel Tour, que ha dominado este deporte durante años, hasta el punto de que hubo un tiempo en que estaban prohibidas las parejas con dos de esos compatriotas, tienen un apodo, un alias, un sobrenombre. Algunos han tirado de imaginación y como si fuese marketing, se han buscado sonoridades más o menos interesantes para la venta de su propia imagen. No ocurre esto con El Galleguito, el gran Juan Martín Díaz, ahora formando la cuarta mejor pareja con Paquito Navarro, recuperando puntos cada torneo tras un año en blanco por lesión. Nunca ha hecho ascos al apodo, que se lo colocaron en Mar del Plata, y por su padre, gallego de origen.
Pues bien, trece temporadas el número uno con Belasteguín, desde 1998 defendiendo a la Selección española, en esta temporada que cumplirá los 43 años su reto era volver a jugar, demostrar que aún es competitivo, y en eso anda, creciendo cada semana en la lista de los mejores a 500 puntos de entrar entre los 10 primeros. Para el Open de Lugo, que en los cuadros arranca el miércoies, le eligieron como padrino, y al lado de la alcaldesa Laura Méndez también estuvieron un par de madrinas, que forman una pareja gallega por excelencia, la lucense Vanesa Alonso y la pontevedresa Isabel Domínguez.
Pero este Open no es uno más de la temporada del World Padel Tour. Es el más ardiente de lo que va de año porque está en juego el volteo definitivo del ranking masculino que ha dominado Belasteguín con Juan Martín Díaz y ahora con el brasileño Pablo Lima. Pues bien, si el apoyo del gran Bela, si haber sido socorrido por él, Sanyo Gutiérrez, cuyo alias viene de la infancia por el parecido con el que anunciaba los transistores japoneses de la época, tiene la ocasión, por tercera vez, de cambiar la historia. "No sé, lo mismo nunca alcanzo a ser número uno", me dijo hace unos días, quitando presión a una situación que no le es ajena a ningún jugador por más que trate de mirar de perfil. Pero no es sólo Sanyo, es Maxi, cada vez más alto que nunca en su carrera, que los recuperados Cristian y Stupaczuk, que Mati Díaz y Alejandro Galán, que el mismo Juan Martín con Paquito. Todos han visto que el gran patrón está recuperando su codo en Barcelona y que hay vía libre con permiso de Pablo Lima con Marcello Jardím.
En la competición femenina la pelea es el cuarto puesto, Marta Ortega-Ariana Sánchez por un lado y Patricia Llaguno y Eli Amatriain, en un pañuelo, con la polémica por la convocatoria para el Mundial de las segundas, y con las primeras intentando refrendar en Lugo que tenían que haber sido las señaladas para viajar a Asunción. Y mientras, las Gemelas Sánchez Alayeto ya a plena velocidad para marcar las diferencias como número uno, ya con cuatro torneo ganados, la mitad de los que se han jugado.