Baker gana el 100 con 6 atletas por debajo de 10 segundos

El estadounidense Ronnie Baker (24 años) venció en los 100 metros de la primera jornada de la Diamond League de Londres, que también se celebrará este domingo. Y lo hizo con un registro de 9.90, cerca de su marca personal de 9.88, y encabezando un grupo de sprinters entre los que seis bajaron de los diez segundos.

Tras Baker, en una carrera muy apretada, con llegada masiva a la línea de meta, se clasificaron el británico Zharnel Hughes (9.93), el sudafricano Akani Simbine (9.94), el jamaicano en decadencia Yohan Blake (9.95), el estadounidense Mike Rodgers y el también jamaicano Tyquedo Tracey.

Rozaron la barrera de los diez segundos el norteamericano Isiah Young y el chino Xie Zhenye (ambos en 10.01) y el noveno (la pista lo permite) fue el estadounidense Cameron Burrel, con 10.07. Una gran carrera.

En la misma distancia, la jamaicana Shelly-Ann Frser-Pryce demostró que se encuentra plenamente recuperada de su maternidad (en 2017 estuvo inactiva) y ganó con 10.98 y sólo un viento a favor de 0,1 metros por segundo. La que en su momento fue la mejor corredora mundial de 100 metros, vuelve a estar en la línea de salida… y primera en la de meta.

Sam Kendricks fue el mejor en pértiga. El estadounidense subió hasta 5,92, luego intentó una vez sobre 5,97 y derribó, y luego afrontó en dos ocasiones los 6,05, con los que tampoco pudo. Batió al francés Renaud Lavillenie, que se quedó en 5,86 y que, a semejanza de su oponente, intentó sobre 5,92 en una ocasión y erró por dos veces en 5,97. Tercer puesto para el niño prodigio de la especialidad, el sueco residente en Estados Unidos Armand Duplantis, que saltó 5,86, como Lavillenie.

Buena marca del qatarí Abdallehed Haroun en los 400 metros (44.07), que batió al estadounidense Paul Dedewo (44.43) y al granadiense Kirani James (44.50). Y en la misma distancia con vallas, marca interesante del noruego Karsten Warholm (47.65).

En la categoría femenina, además de Shelly-Ann Fraser-Pryce, destacaron en longitud las británicas Shana Proctor (6,91) y Lorraine Ugen (6,88).

Y una anécdota, aunque sea un récord mundial: el también británico Tom Bosworth hizo un tiempo de 43:84 en tres kilómetros marcha en pista. Distancia que, más que nada, es una exhibición.