Botello y Ruiz conquistan en Lisboa su primer título juntos

Con 30 años cumplidos sus componentes ya no se puede decir que formen una pareja joven, pero Uri Botello y Javi Ruiz son, por los menos, nuevos como tándem y con un largo periplo personal. Por eso disfrutaron  como niños su primer éxito juntos, en la final del Challenger de Lisboa donde sumaron todos los puntos para su ranking ganando la final por 6-3 y 7-5 a Diego Ramos y a Rafa Mendez. Una semana antes los ganadores había sido arrasados por Lijó y Grabiel.

Botello lleva años apuntando alto. Con el madrileño Concepción también estuvo en finales del Challenger, y el año pasado con Poggi no alcanzó lo que esperaba. Eso sí, el melillense es un uno de los jugadores más reivindicativos, y ahí anda, impulsando una Asociación de Jugadores.

Ruiz, que iba para tenista, que fue un talento de futuro en este deporte, que pasó por la fábrica en Barcelona, hace unos años cambió la raqueta por la pala, y esta temporada parece que ha encontrado el complemento ideal para su juego: alguien que defienda, quien amase el punto, para que él lo defina. Es el mérito de las parejas con aspiraciones, que los dos componentes complemente sus roles sin problemas de egos. Por eso, con los puntos de Lisboa, y con lo que ganaron en Madrid y que se suman la próxima semana, si en el Open de Valladolid les va como parece, en julio pueden asentarse entre las 10 mejores parejas del World Padel Tour, y aspirar esta temporada de eclosión de los jóvenes a meterse en el Master como pertenecientes a la generación intermedia, entre los que dominan el WPT y los que vienen empujando. Su forma de jugar en la final ante Ramos y Méndez, de controlar el ritmo del partido, de aprovechar sus ocasiones, les concede un punto de madurez que invita a que sean una apuesta más en esta temporada tan abierta,