El VRAC, rey en Valencia y Valladolid: quinta Copa
Siempre mandó en el marcador y fue superior físicamente a su rival. Más de 15.000 personas poblaron las gradas del Ciudad de Valencia y el TMO funcionó sin problemas.
Pues ya está. La final de Copa se jugó en Valencia y salió bien. Ni una lluvia de meteoritos cayó sobre el Ciudad de Valencia ni un tsunami arrasó la capital valenciana. Al final, la polémica no era para tanto. Más de 15.000 personas poblaron las gradas en un día soleado y disfrutaron de otro paso de gigante para el rugby. El ambiente sobre todo lo pusieron unos 1.000 vallisoletanos presentes, al fin y al cabo los únicos que se jugaban algo en lo deportivo.
Ganó el VRAC, que suma la quinta a su palmarés. Siempre manejó el marcador a su favor. El partido no. Los 15 primeros minutos fueron suyos porque el Chami se quedó en el autobús un rato más. El parcial de 0-13 para los queseros con un ensayo tempranero de Mateu y tres de tres al pateo para Griffiths lo confirmó. Reaccionó El Salvador con marcas de Wozniak, encargado de culminar un maul potente en 22, y Junior, tras buena percusión para ganar la línea de ventaja. Sin embargo Katz, su pistolero repatriado desde Francia para esta final y el reto de destronar al VRAC en Liga, no supo lidiar con el viento en contra y falló sus tres intentos a palos. Se llegó al descanso con 10-13 y una correlación de fuerzas equilibrada.
En el entretiempo, las cámaras cazaban en las gradas a Óscar Puente, alcalde de Valladolid. Hace días declaró que su intención era ver el partido en casa, en la fan zone que su ayuntamiento promovió para los aficionados de ambos equipos. Pero el evento tuvo que cancelarse por las malas previsiones meteorológicas en Pucela y el regidor acabó a orillas del Mediterráneo. En el palco, personalidades como Ximo Puig, presidente de la Comunidad Valenciana; Alfonso Feijoo, de la FER, o el seleccionador nacional, Santi Santos. Hacía tiempo que se sabía que esta vez no acudiría el rey y así fue.
En la segunda parte el ritmo, que nunca fue muy alto, bajó más. Katz ya sí sumó, con su pie derecho, los seis puntos del Chami en los segundos 40'. Pero su equipo no encontró la forma de penetrar la defensa de su rival y sufrió el mal de la indisciplina en las abiertas, cuando no errores de manos, cada vez que entró en la zona de 22 del Quesos. Éste, por su parte, fue más resolutivo con un ensayo de Gavidi a la salida de un ruck en el 52'. A partir de ahí, con más gasolina en el depósito que El Salvador, supo manejar su renta y mató el partido con el oval en su poder.
Esta quinta Copa se la quedará en propiedad el equipo quesero, que rompe la maldición de las tres finales anteriores perdidas ante su vecino. Valencia, por su parte, ha demostrado su capacidad organizativa a la primera oportunidad que ha tenido. Su rugby ha crecido este domingo y con él el de toda España. También la Copa como competición, con su tercera final exitosa seguida en un campo de fútbol. ¿Dónde nos tomaremos la siguiente?