Yoel Romero exhibió pegada sin cinturón en el UFC 221

Todo lo que le pudo salir mal a la UFC en caunto a planificación el UFC 221 le salió. Robert Whittaker se lesionó dejando descabezado el evento organizado en su país, Australia. Lo subsanó con un combate de categoría: Romero vs Rockhold, el ganador sería campeón interino y retador al título... pero esa posibilidad se esfumó. Yoel Romero ganó por KO en el tercer asalto a Luke Rockhold, pero no puede ser campeón al haberse pasado 2,5 libras del peso pactado en el pesaje. No optaba al título, por lo que el orden que quería instaurar la UFC no fue tal. Los pesos medios siguen siendo un descontrol.

En cuanto al combate, en menos de tres asaltos ocurrieron muchas cosas. La primera fue que Romero regaló el round inicial, tirando apenas cinco golpes certeros. En el segundo apretó y cazó con varias manos a Rockhold, que fue de menos a más y acabó llegando el con claridad. En el tercero, que sería el definitivo, todo cambió. Yoel Romero se dedicó a tomar el centro del ring y cerrar espacios a su rival. Así buscaba encontrar el hueco para una mano letal. Lo hizo con una izquierda volada que esquivó el golpe del estadounidense. Rockhold caía medio dormido y con un tremendo upper sin oposición lo puso envió directo a la habitación del sueño.

Quizá fue excesiva su dureza con un rival que estaba practicamente noqueado... aunque había avisado: "Con Whittaker aprendí que si tienes al rival a tiro hay que ir por él", y cumplió su palabra. Después corrió feliz por todo el octágono, subiéndose a él y todo. Por ello, extraña más que se retirase cojo de una pierna ayudado por su equipo. Raro. No obstante no se puede obviar, ya que una lesión larga enturbiaría más aun la categoría.

Romero debería de tener su oportunidad contra Whittaker, pero falta saber cuanto tardará el campeón (era interino y ascendió sin pelear) en recuperarse. Ahí entra Ronaldo Souza, que viene de exhibirse y pedir su oportunidad. Sin duda son muchas las opciones para una división muy rota. Toca esperar. Mientras, Romero se va con el premio de una victoria de prestigio... pero sin título.