España contra la Portugal de Ricardinho por dominar Europa
España busca su octavo entorchado continental. Ha jugado nueve finales y sólo ha perdido una. Ricardinho persigue su primer título con su selección.
La final soñada. España defenderá hoy (20:45, DMAX) en la final de Liubliana su título europeo ante la Portugal de Ricardinho, el mejor jugador del planeta. La Selección, tradicional dominadora continental, quiere repetir la historia y alzar su octavo título ante los vecinos lusos, que nunca se vieron tan cerca de ganar un torneo importante. Una final muy abierta a la que Portugal llega abanderando el jogo bonito y España mostrándose como un bloque imperturbable.
El seleccionador español, José Venancio López, define muy bien las sensaciones en las horas previas: “Somos humildes y sabemos que Portugal está a un nivel altísimo, pero nosotros somos un equipo ganador”. No obstante, España disputa hoy su novena final en once ediciones. Y poco importa ya que el camino a esta haya sido más espinoso que en otras ocasiones. “El objetivo es el mismo que el primer día: ser campeones”, apunta Pola.
No será la primera vez que el duelo ibérico decida el título europeo. En 2010, en la única final que ha disputado Portugal en su historia, España se llevó la victoria. Una cita donde Ricardinho fue baja por lesión, aunque tampoco la presencia del astro ha cambiado la inercia. Hace dos años en Serbia, cuando los goles de O’Mágico daban la vuelta al mundo, la Selección ejerció de verdugo endosándole un 6-2 en cuartos. De ahí que en Portugal no quieran ni hablar de antecedentes, como asegura el técnico Jorge Braz: “No hay favorito, la historia no cuenta, esto está 50-50”.
Y no se puede negar que esta vez Portugal desprende un halo diferente. Ricardinho, que con 32 años se encuentra ante una de sus últimas oportunidades de levantar un título con la selección, ha brillado con tanta fuerza (seis goles y cuatro asistencias) que quizá no haya dejado apreciar que sus compañeros han dado un salto de calidad enorme. A Venancio eso no se le escapa: “No vamos a hacer ningún sistema especial para parar a Ricardinho porque queremos imponer nuestro estilo. Ese es el mensaje que quiero transmitir”. Es la filosofía que ha hecho a España la reina del fútbol sala europeo. Este sábado es el día de demostrarlo.