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FÚTBOL SALA | ESPAÑA - KAZAJISTÁN

España pasa en los penaltis: final europea contra Ricardinho


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Actualizado a
España jugará la final de la Europa de Fútbol Sala al derrotar a Kazajistán en los penaltis.
EFE

España defenderá este sábado (20:45, Dmax) su título continental en una final de ensueño de la Eurocopa ante la Portugal de Ricardinho. Lo hará después de salir victorioso de una tremenda batalla en semifinales ante Kazajistán (5-5) donde hubo golazos, tensión, alternativas, prórroga... y tanta igualdad que sólo se pudo resolver en la tanda de penaltis. Allí apareció Paco Sedano para detener el lanzamiento de Taynan y darle a la Selección la oportunidad de aspirar a su octava corona europea.

El partido fue espectacular. Dos filosofías frente a frente. La española basada en elaborar y elaborar hasta encontrar la grieta. La kazaja, a base de subidas al ataque de Higuita y la verticalidad de sus otros dos brasileños, Douglas y Taynan. Entre ambos fabricaron el gol que abrió el marcador. La buena noticia es que España mostró capacidad de reacción a base de estrategia. Un saque de córner que Yesenemanov metió en la meta de Higuita y otro de un Tolrá que se reivindicó tras ser señalado en el primer partido dieron la vuelta antes del descanso.

Pero tras la reanudación apareció Higuita. Un misil suyo atravesó la nube de jugadores que tapaban a Sedano y devolvía la igualdad. El gol le hizo daño a España. Tanto, que encajó el 2-3 a los 45 segundos. Pero esta Selección tiene un salvavidas: la estrategia. Un a priori inofensivo saque de banda de Bebe dejó sólo a Joselito para que hiciera el 3-3. Era entonces España la dominadora y Pola lo materializó en el 4-3, pero no mató el partido. Kazajistán siguió viva y Douglas llevó el partido a la prórroga.

La prolongación fue una montaña rusa de emociones. Un zurdazo de Miguelín volvió a adelantar a la Selección, que se veía ganadora ante un rival tocado físicamente... pero no muerto. Zhamankulov, a 2:20 para el final, llevó el partido a la tanda de penaltis, donde los españoles, más acostumbrados a estas situaciones límite, no fallaron. Miguelín, Ortiz y Lin marcaron y recubrieron de oro la parada de Sedano. Una intervención (por cierto, con sus partes) que vale una final europea.