Mechaal y España alcanzan la plata en los Europeos de cross

Adel Mechaal cierra un gran 2017 para él con la medalla de plata en los Europeos de campo a través de Samorín (Eslovaquia). Tras ser campeón de Europa indoor de 3.000, cuarto del mundo en 1.500, Mechaal dio muestras de su versatilidad, y de su fondo, en una carrera de 10 kilómetros de cross en la que dio la cara, peleó y sólo fue sorprendido por Kaan Kigen Ozbilen. El turco nacido en Kenia (antes Mike Kigen) llegó desde atrás e impuso su resistencia de maratoniano ante el mediofondista largo español, que cedió en los últimos giros. Con el segundo puesto de Mechaal, el octavo de Dani Mateo y el décimo de Lamdassem, España también alcanzó la plata por equipos. Hicieron 20 puntos, a tres de Turquía (17). 

Con entrenamientos prodigiosos en Madrid a sus espaldas y en "uno de los mejores momentos de forma" Mechaal desembarcó en el hipódromo eslovaco con la idea clara de superar su bronce de Hyeres en 2015. El frío circuito, de corto césped y muy llano, le favorecía ("Me encantó y sabía que se adaptaba a mí", reconoció). Era muy parecido a la pista. Y el de Jebha, de 27 años, que llegó a Palamós con cinco y ahora vive en la Blume, salió a por todas. Controló la cabeza y vigiló a sus rivales, sobre todo a los británicos que eran los únicos que aparecían en los puesto delanteros. Turquía no arrancaba tan feroz como en otras ocasiones... y Mechaal parecía rodar cómodo. 

Fueron pasando los kilómetros y Mechaal daba sensación de facilidad mientras los británicos desfallecían uno a uno. Primero Griffiths se retiraba con un tirón en el isquio, luego Connor cedía y el más fuerte, Butchart (sería bronce), se quedó en el momento que nacía otro rival al discípulo de Antonio Serrano. Era Kigen, ganador de varias San Silvestres y con 2h 06:10 en maratón. Más diesel que Mechaal, Kigen enlazó a falta de dos kilómetros y no perdió gas. Siguió con la misma tensión y el español se crispó. A veces aguanta con esa pose, pero es cuando corre en pista. El cross es más machacante y pasó factura. Se quedó, miro atrás y en la recta de meta le dio tiempo a recoger la medalla de plata cuando certificó la plata. "Intenté ganar, me voy a casa con dos platas, el año que viene espero pelear por el oro". Para 2018 ha anunciado que quiere hacer 3.000 en los Mundiales de pista cubierta y doblar en 5.000 y 10.000 en los Europeos al aire libre de Berlín. 

"Disfruté la carrera, estaba observando a mis rivales muy de cerca, cuando un corredor se sentía mal o los veía cansados daba un paso más, me arriesgué y trabajé duro para llegar segundo. Estoy muy satisfecho con mi medalla de plata", comentaba Mechaal, que sumó la medalla individual número 21 para España en los Europeos de cross. . 

Bronce en el estreno de los relevos mixtos

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El último podio en Samorín fue el bronce en el estreno del relevo mixto 4x1.500. Lo formaron Solange Pereira, Víctor Ruiz, Esther Guerrero y el ochocentista Jesús Gómez. La gallega Pereira hizo la primera posta que sería determinante. Se fue en cabeza con la checa y la británica. Y esos tres países conformarían el podio. En la última posta Gran Bretaña aseguró el oro con Charlie Grice, República Checa capturó la plata con el experimentado y rapidísimo Jakub Holusa y Gómez remachó el bronce. 

En mujeres, Yasemin Can, también turca nacida en Kenia, dinamitó desde bien pronto la carrera absoluta e hizo un monólogo en Samorín. Se marchó en solitario y metió una distancia suficiente para controlar la carrera. Sólo quedaba saber quiénes serían segunda y tercera. Plata fue la sueca Meraf Bahta y bronce la noruega Karoline Grovdal. Trihas Gebre se fue hasta la 13ª posición y llegó en meta tocándose el bíceps femoral derecho. Por su rendimiento en los crosses de Atapuerca y Alcobendas se esperaba más de ella. Fue 17ª Nuria Lugueros y 30ª Ana Lozano. De Samorín, España ha obtenido la plata de Mechaal, la plata masculina por equipos, el oro Sub-20 de los chicos y el bronce Sub-20 femenino.