Putin: "No declararemos ningún boicot a los Juegos de invierno"

El mismo día en el que anunció que se presentaría a su cuarta reelección, el presidente de Rusia Vladimir Putin mandó un mensaje de calma respecto al veto del COI a su país a competir como equipo en los Juegos de Invierno de Pyeongchang (9-25 febrero de 2018) por sus problemas con el dopaje: “Nosotros no declararemos ningún boicot ni impediremos que nuestros deportistas olímpicos participen, si alguno de ellos quiere competir a título individual bajo bandera olímpica podrá hacerlo”.

Putin, que criticó “el castigo colectivo” incluso dio cierta razón al COI: “En parte es culpa nuestra”. La tranquilidad de Putin contrasta con las reacciones inmediatas que hubo en el ­Kremlin de llamar a la rebeldía y no dejar a ningún deportista acudir. “No hay que dejarse llevar por las emociones”, decía ahora Peskov, portavoz del Gobierno ruso.

Los rusos no oirán su himno, ni lucirán sus colores, pero tienen oportunidad de competir bajo las siglas de OAR (Olympic Athlete from Russia), iniciales que esperan, por ejemplo, tener en el equipo de hockey hielo, principal favorito al oro sin los jugadores de la NHL. Ese es el deseo de Putin y de la estrella Ovechkin: “Hay que ir obligatoriamente, no ir sería rendirse”.

Pero todos los rusos que quieran acudir a la cita deben someterse al exigente panel liderado por Valerie Fourneyron en el que hay que demostrar estar limpios y responder las peticiones de este grupo de trabajo. “Celebramos las decisiones meditadas de castigar a Rusia y las de crear un grupo de trabajo”, decía Craig Reedie, desde la Agencia Mundial Antidopaje (AMA), que pidió fervientemente la exclusión de Rusia.

Otra que se expresó bien alto fue Tatiana Tarasova, la entrenadora del equipo de patinaje artístico de Rusia. “Es el homicidio del deporte de nuestro país”, decía Tarasova, que fue crítica con Vitaly Mutko, ministro de Deportes: “Debe responder por lo que ha sucedido”. Rusia está en shock por la noticia, pero parece aceptarla.