Ricardinho frente a Higuita por una plaza en la Final Four
Movistar y Kairat se miden este domingo (20:00, Eurosport2) en pleno debate sobre el portero-jugador. El equipo kazajo es el que más partido saca a la regla.Palma-Movistar: semifinales de la Copa del Rey
El tetracampeón de la UEFA Cup, el Movistar Inter, se mide con el Kairat kazajo, dos veces rey de la competición (2013 y 2015). Ese es el partidazo que este domingo (20:00, Eurosport2) decidirá la última plaza para la Final Four europea. Un encuentro que, por si no tuviera pocos alicientes deportivos, llega en pleno debate sobre la regla del portero-jugador, esa que permite cambiar al meta por un jugador de campo.
La polémica se reabrió el viernes en el choque entre los madrileños y un Deva rumano que, entrenado por el español Marcos Angulo, llevó al límite la norma para dormir el duelo a pesar de ir perdiendo: atacó de manera muy conservadora, así que pareció por momentos que daba por bueno caer por 2-1 ante el vigente campeón de Europa. Ricardinho, estrella del Movistar, acabó desquiciado. “¡Esto no es deporte!”, explotó en Eurosport.
Y es que la regla sobre el portero-jugador, creada para fomentar el espectáculo, también puede ser empleada para perder tiempo y mantener el resultado, y no son pocas las voces (incluido el propio Angulo) que piden a la UEFA y a la FIFA que se revise la normativa. Sin embargo, otros, como Cacau, técnico kazajo-brasileño del Kairat, le han sabido sacar rendimiento (dos títulos europeos lo demuestran). En su caso, aprovecha que cuenta con Leo Higuita, un meta con un pase y un disparo tremendos (dos goles en dos encuentros en esta fase), lo que le permite tener la variante de atacar con cinco sin cambiar al portero.
“Conlleva un enorme riesgo no tener al meta bajo los palos, pero esta estrategia la trabajamos mucho y creo que aportamos un nuevo estilo”, cuenta Higuita a As. Ricardinho le da la razón: “Ellos sí que atacan y te obligan a estudiarles. Higuita marca más tantos que muchos jugadores”. “Me considero un portero diferente”, se define él mismo: “Mi trabajo es salvar goles, pero anotarlos supone una sensación muy especial”.
Este domingo, en un duelo con aroma a revancha (se midieron en la pasada Final Four, con triunfo para los madrileños), Higuita se convertirá en una de las grandes amenazas para un Movistar al que le vale el empate para volver a estar entre los cuatro principales de Europa. Pero debe salir vivo de un partido en el que se enfrentarán dos de los mejores equipos del continente, liderados por dos referentes mundiales como Ricardinho e Higuita, y que se mirará con lupa en pleno debate sobre el reglamento.