Raw se alza con la supremacia de la WWE en Survivor Series

La supremacía de la WWE estaba en juego en Survivor Series. Los luchadores de Raw y de Smackdown habían mantenido duros enfrentamientos en las semanas previas a este evento. Había mucha tensión por mostrar cual de las dos marcas era la más potente... y Raw lo ratificó. En el global de la noche ganó cuatro de los siete combates, pero entre esos cuatro destacan tres de los cuatro más importantes: la lucha de equipos femenina, la masculina y el duelo entre campeones de ambas divisiones. Survivor Series no defraudó, pero Raw dejó claro que está un paso por delante.

En la primera de las tres luchas importantes, Raw venció, pero fue en la que más sufrió. Un combate de cinco contra cinco siempre es una lotería y así fue. Gracias a una buena jugada de Natalya, Sasha Banks fue eliminada. Quedaban entonces Natalya y Tamina por Smackdown para medirse a Asuka por parte de Raw. No se arrugó la japonesa. Primero eliminó a Tamino por sumisión, después tras una buena serie de patadas acabó con la excampeona de Smackdown para sumar la victoria para la marca roja.

En orden cronológio, entre los dos enfrenamientos por equipos se produjeron las peleas entre campeones. Charlotte derrotó a Alexa Bliss, único duelo de los importantes que ganó Smackdown. El pleito estuvo muy igualado y se revolvió por un fallo de Bliss, que saltó desde las cuerdas y fue recibida por las piernas de Charlotte, quien aprovechó para ganar. En el combate entre campeones masculinos, la diferencia de fuerza y tamaño entre Brock Lensar y AJ Styles fue la clave. Lesnar dejó claro su gran dominio y aunque AJ estuvo muy bien y supo aprovechar los momentos de debilidad de su rival sólo pudo incomodarle en dos ocasiones, el resto fue un paseo para el campeón de Raw.

Por último, en el choque de ambos equipos masculinos el protagonista fue Braun Strowman. El gigante fue un quebradero de cabeza para el equipo de Smackdown, quien se tuvo que unir entero para hacerle un Suplex en la mesa de los comentaristas. No le frenó y fue el más destacado. Shane McMahon fue el último de la marca azul en resistir. Triple H le quitó el relevó a Strowman, quedaban ellos dos por Raw (también estaba Kurt Angle, pero Triple H le eliminó con un pedigree, y logró la victoria. Pese a los esfuerzos de Triple H para que el gigante celebrase con él la victoria, este estaba dolido y le acabó agarrando del cuelo y atacándole una vez terminado el combate. "No vuelvas a jugar conmigo" le gritó Strowman mientras le atacaba. Un feudo está en ciernes.