El Ademar muestra su mejoría ganando claramente a Gorenje
Con la victoria supera la diferencia de goles ante un rival directo en la lucha por los dos primeros puestos del grupo de Champions
El Abanca Ademar sigue demostrando que su recuperación anímica es un hecho, unido a una mejoría sustancial en su juego que le permite, no solo sacar adelante los partidos, sino también superar con cierta holgura a sus rivales, como ante un Gorenje Velenje esloveno al que derrotó por 28-24 y superó la diferencia de goles para un hipotético empate.
Con un juego más coral, explotando al máximo todos sus recursos y con una defensa que, por momentos en la segunda mitad, rozó la perfección, fue capaz de sacar de la pista a un rival directo por el objetivo de las dos primeras plazas para continuar en Europa.
Los leoneses mostraron una imagen muy compacta en su juego desde el arranque, con un ataque en el que la fuerza de Juanjo Fernández y el juego desde el pivote con Carou empezó a dar réditos, junto a una defensa 6-0 sólida y que impedía los lanzamientos de la primera línea eslovena.
Muy pronto la diferencia se ensanchó hasta los cuatro goles (7-3 y 11-7), pero las rotaciones en ambos equipos les sentaron mejor a los visitantes que, gracias a una mejoría defensiva, lograron un parcial de 0-3 que les colocaba a la mínima expresión de los ademaristas (13-12) dentro de los últimos minutos de la primera parte.
Sin embargo, la pillería de Juanín García para robar un balón y marcar a puerta vacía cuando el Gorenje atacaba para igualar por primera vez el marcador dio aire a un Ademar que había aguantado la ventaja con las penetraciones del brasileño Acacio Marqués y que llegó por delante al descanso (15-13).
Ademar repitió el buen inicio en la reanudación con un parcial de 2-0 dejando cinco minutos sin anotar a un Gorenje en modo diesel, también por la buena defensa leonesa con constantes ayudas y la entrada de Cupara en portería.
El técnico rival tuvo que parar el partido ante la espesura del juego de su equipo (18-14, minuto 38) porque ninguna de sus piezas de primera línea tenía clarividencia y con un gol de rosca de Juanjo Fernández, el manchego ponía la máxima renta de cinco goles.
Pero la desesperación eslovena fue creciendo, ante la impotencia para superar un 6-0 perfectamente ajustado, lo que aún amplió más la ventaja ademarista a la media docena de goles (22-16), después de probar soluciones sin éxito como una defensa con avanzado y un ataque con portería vacía.
Ademar no bajó la guardia, mantuvo la intensidad y la rabia contenida quizá después de que antes del parón pareciera tocar fondo y acabar sacando de la pista a un rival vapuleado, entregado e impotente que mínimamente pudo maquillar el resultado final 28-24.