El Bidasoa también derrota a un Logroño que no despega
Aunque el conjunto riojano remontó en la segunda parte, en la recta final no pudo puntuar en Irún, y sólo lleva un triunfo en la Liga
Artaleku ha acogido un partidazo de balonmano con victoria y sobredosis de moral para el Bidasoa Irún y más problemas para el Balonmano Logroño, que se queda en la zona de descenso con dos puntos después de cinco jornadas.
Los riojanos levantaron un 20-13 y entraron en los minutos finales con varios empates, pero el triunfo se quedó en Irun y fue muy celebrado.
Aunque el primer gol fue visitante, fue el equipo local quien salió mejor al partido y lo fue demostrando con el paso de los minutos. Para Logroño atacar era una asignatura pendiente con cuatro errores diversos en los primeros cinco ataques y Bidasoa con trabajo conseguía marcar goles.
La igualdad se mantuvo en los diez primeros minutos, hasta el 5-5. En ese momento las dos primeras paradas de Zubiria espolearon al anfitrión, que hizo un parcial de 4-1 para colocar un 8-5 que pocos esperaban. Y menos aún se podía pensar que esa renta fuera a mantenerse en el marcador durante todo el primer tiempo, en el que el equipo local jugó un gran balonmano en todas sus facetas. Solo así podía hacer frente a un gran rival como el Logroño.
Salinas se fue hasta los cinco goles con gran efectividad y suyo fue el 14-10, máxima renta hasta el momento. Incluso el Bidasoa-Irun tuvo posesión para un 15-10 pero no la aprovechó y al descanso se llegó con 14-11.
En la reanudación de nuevo primer gol visitante para un 14-12 pero igualmente viento a favor para los locales con gran defensa y acierto en ataque para escaparse primero a 17-12 -tiempo muerto visitante- y después a 20-13, máxima renta en el minuto 8'20''. Desde el mencionado tiempo muerto el Logroño defendió en 5-1 y prescindió de portero en sus ataques y le fue bien, aunque también recibió dos goles a portería vacía, uno de ellos del portero Ledo.
El 20-13 supuso un punto de inflexión tras el cual los irundarras estuvieron casi diez minutos sin marcar, recibiendo así un parcial de 0-6 que metió a los riojanos en el partido (20-19), con doce minutos por jugar. Fueron de gran intensidad, se registraron empates a 23, 24 y 25 y a 25 segundos del final Jon Vázquez marcó el definitivo 27-25.