Sanyo Gutiérrez: "Estoy en la mejor temporada de mi vida"
El argentino no sabe si la próxima temporada continuará con Paquito Navarro "porque es pronto para hablarlo; pero lo lógico es que sí"
Sanyo Gutiérrez es un tipo discreto en la pista, tanto que en su pareja siempre deja que sea Paquito Navarro el que reciba los parabienes. El llegó a España con una mano delante y otra detrás "porque acá no se sabe lo que luchan los chicos argentinos por destacar. Acá hay de todo, y allá nada, pero se entrena a muerte, y aquí, teniéndolo todo, hay muchos que vaguean".
El caso es que forma con Paquito la pareja número dos del ránking: Belasteguín (Argentina) y Lima (Brasil) son los números uno, y Navarro (España) y él (Argentina) los dos. Es decir, Sanyo es el tercero pero el segundo argentino: "No me importa. Yo no juego el ránking argentino. Lo mío es el Mundial".
Y en el Mundial, de este año, "ahora mismo, por lo que va de año, la mía es la mejor pareja, con 500 puntos sobre Bela y Lima, pero en Granada todo puede cambiar, que nos volteen o que cojamos más diferencia", apunta el argentino, que no duda que la actual es "la mejor temporada de mi vida, y estoy en mi mejor momento. Posiblemente sea el jugador que más se entrena".
En el pádel se habla de la semifinal del WPT en Andorra, donde Paquito y Sanyo la jugaron distanciados y sin hablarse. Y aún así ganaron. "Creo que Maxi y Mati acabaron tristes ese partido, porque lo tuvieron ganado y forman una pareja muy sólida. Nosotros, pese a nuestra situación personal, sea la que sea, en todo momento jugamos a tope, y tuvimos la suerte de que no fallamos".
¿Qué pasó para ese enfado tremendo? "Son cosas de pareja. Algo que ocurrió en el partido, pero que arrastrábamos y no lo habíamos solucionado. Fue una cosa puntual. Se arreglo y en la final fuimos otra vez los de siempre, y por eso ganamos", cuenta Gutiérrez,
De su futuro no sabe lo que pasará, "porque es pronto para hablar, pero lo normal es que Paquito y yo sigamos juntos", apunta y sale al paso de cualquier especulación, porque de Andorra regresó con Belasteguín "hasta Barcelona, porque en el coche de Paquito, con tantas bolsas ya no se cabía", y en el viaje con el número uno "hubo respeto. No se habló de pádel, ni de la final, ni del ránking, ni de la temporada".