Irene y Mariajo, dos doctoras para los 3.000 obstáculos

Irene Sánchez-Escribano y María José Pérez llevan vidas paralelas. Se conocen desde los 12 años. Una es de Toledo y la otra de Ciudad Real, ambas nacieron en 1992, se entrenan en Madrid con Antonio Serrano, hacen Medicina y las coincidencias siguen... hoy las dos estarán en sus primeros Mundiales en las series de los 3.000 obstáculos. 

Irene, que ya acabado la carrera y sueña con ser médico quirúrgico, ha explotado esta temporada. Ha cambiado la dinámica. “Que se haya centrado en el atletismo ha sido fundamental, descansa más y entrena mejor”, cuenta Serrano sobre Sánchez-Escribano, a la que empezó a dirigir con marcas medias y ahora el técnico de La Solana le ha guiado a la élite de los obstáculos: “Cuando empecé a hacerlos era un pato mareado, pero con fuerza he mejorado. Antonio me propuso dar el cambio de prueba y acepté. Aquí quiero tener la valentía de correr a mi máximo nivel. Estoy en buena forma”. Su marca es 9:40.30 y van en la primera serie: “Será muy exigente”.

Mariajo está en 5º de carrera (empezó Podología antes) y aspira a traumatóloga. Su registro, para seguir con las coincidencias, es casi calcado: 9:40.51. Irá en la tercera serie. “Nunca se puede decir no, pero la final estará difícil”, cuenta Pérez. Ambas forman parte de la nueva generación de fondistas que sustituyen, con Ana Lozano, Esther Guerrero, Marta Pérez (también médica) a las “míticas”. “Son serias, disciplinadas, tranquilas”, cuenta Serrano de las doctoras obstaculistas.