Jay Cutler da el sí a los Miami Dolphins por 10 millones

Jay Cutler ha dado el "sí, quiero" a los Miami Dolphins. Tras pensárselo menos de 24 horas ha decidido aceptar el reto de dirigir al equipo y tratar de meterlo en playoff, donde ya estuvieron el año pasado.

Las últimas horas en los Dolphins han sido una montaña rusa, aunque es probable que este último movimiento conste como caída libre en vez de como subida en la opinión de la mayoría de su masa de seguidores.

Ryan Tannehill, quarterback franquicia del equipo, se lesionó en un entrenamiento. Fue sin contacto y con muy mala pinta. Tanto que se levantó una cortina de silencio al respecto, siempre una señal horrorosa, y sólo se supo que sus compañeros rezaron por él, quizás aún peor señal.

En las primera pruebas médicas que se le practicaron pareció descartarse una rotura total de los ligamentos, el mayor de los miedos, por lo que se levantó un poco de optimismo al respecto del jugador y el equipo. Pero no tardó en pasar ese primer oleaje y comenzó a subir la marea de que, de todas maneras, una operación y una temporada 2017 sin jugar estaban en el horizonte.

A partir de ahí, y sin confirmarse aún la gravedad de la lesón de Tannehill (y así seguimos), los rumores comenzaron a situar a diversos quarterbacks en la posición de aspirante a dirigir los Dolphins. Colin Kaepernick, que sale en todas (sea verdad o mentira) por el inmenso tirón mediático de su situación; Matt Moore, el suplente, porque era una opción lógica; hasta de Blaine Gabbert, por su actuación en el partido del Hall of Fame, o de Teddy Bridgewater, por un like en redes sociales (¿?) se dijo tal o cual cosa.

Pero Adam Gase, entrenador de los Dolphins, lo tenía claro desde el principio: Jay Cutler. El veterano quarterback de los Denver Broncos y los Chicago Bears fue su jugador en la temporada 2015 en los Bears, siendo Gase coordinador ofensivo. El recuero que tiene de él, es evidente, no puede ser mejor.

Porque aún sabiendo que Cutler se había retirado y había aceptado un trabajo muy suculento en televisión, le llamó para ficharle. Le llamó y, cuentan, el sábado por la tarde le insistió tanto que le puso la cabeza como un bombo para que se le uniera. El QB le pidió tiempo y doce horas después ha firmado con Miami.

El contrato es estupendo: 10 millones de dólares por un año, que podrían ser 13 si se alcanzan determinados objetivos (¿Super Bowl?) y la seguridad de que llega para dirigir el equipo y no para pelear con nadie.

Los Miami Dolphins han salido de una muy mala situación con el QB que su entrenador deseaba. Estoy seguro que eso pondrá nerviosos a muchos aficionados, porque la fama y la carrera de Cutler es la que es, nada buena, pero si tienen fe en su entrenador, y todo lo que ha hecho hasta ahora en la NFL es para tenérsela, no deja de ser una solución notable dadas las malas circunstancias.