"No me lo esperaba, pero tuve paciencia y apreté al final"

Una sonriente Mireia Belmonte, por la medalla y por el récord conseguido, llegó corriendo a la zona mixta para atender a la prensa desplazada a Budapest. Fueron unos primeros minutos de liberación, justo antes de acudir al podio, aún aturdida por el esfuerzo y el éxito. "No me lo esperaba. Era una carrera difícil. Éramos cuatro chicas para dos medallas. Tenía que salir valiente y de las primeras, y luego luchar hasta el final", comentó la badalonesa.

Tenía Mireia clara la estrategia, pero siempre surgen momentos inesperados en una prueba tan larga: "Kapas ha atacado al principio, pero mantuve la calma. Ellas se fueron atrás y dejé a la italiana fácil e hice la carrera que quería hacer. Controlaba a los dos lados. Fue muy buen tener a la italiana al lado. Luego esperaba que en la otra parte me apretarán", aseguró.

Salió Mireia por la calle 5, la que le gusta, como en sus primeras medallas de Londres. Una de las claves de la carrera, insistió la nadadora de la UCAM, fue nadar al lado de Quadarella, que le hizo de liebre a la española sin quererlo. "Fue muy bueno nadar con ella. Al final creo que hice un esfuerzo de ir a por ella y conseguir la plata". Una prueba que Mireia nunca había logrado medalla en un Mundial. "Para esta final no estoy acostumbrada. Hay que tener mucha calma, paciencia y acelerar al final. Puedes pagar el esfuerzo".